El Papa Benedicto XVI pidió hoy en un mensaje especial 'sembrar' sentimientos de comprensión, misericordia y reconciliación para mejorar al hombre y a la sociedad en Cuba, como lo hace la Iglesia.
La sala de prensa del Vaticano dio a conocer este jueves el mensaje que el pontífice envió a la isla caribeña a través del 'número dos' de la Sede Apostólica, el secretario de Estado Tarcisio Bertone, quien cumple en Cuba una gira pastoral.
'En ocasiones algunas comunidades cristianas se ven abrumadas por las dificultades, por la escasez de recursos, la indiferencia, incluso el recelo que pueden inducir al desánimo', constató el escrito.
Benedicto XVI pidió no desanimarse porque, en muchas ocasiones, 'una pequeña luz puede iluminar toda la casa, la levadura es poca cosa, pero hace fermentar toda la masa'.
'Cuántas veces pequeños gestos de amistad y buena voluntad, gestos sencillos y cotidianos de respeto, atención al que sufre o entrega desinteresada al bien de los demás hacen entrever el amor sin límites de Dios por todos y cada uno', añadió.
El Papa recordó la visita que su predecesor Juan Pablo II hizo a Cuba hace 10 años, al subrayar que fue vivida bajo la 'mirada emocionada' de todo el mundo, y pidió renovar el 'auténtico impulso evangelizador' dejado por él.
Reveló que reza constantemente para que Dios sostenga la 'fortaleza y generosidad' de los obispos cubanos y puedan vivir 'con intensidad' su fe y trabajar a favor del mundo.
En el mensaje, en particular a ellos, indicó que las prioridades pastorales en Cuba son anunciar la recta doctrina, iniciar en la escucha y profundización de la palabra de Dios, promover la participación en los sacramentos y fomentar la vida de oración.
El líder católico evocó también las obras de dos personalidades de la historia cubana, el siervo de Dios Felix Varela y José Martí, a quien calificó de 'propagador del amor entre los cubanos y entre todos los hombres'.
Destacó la 'gran importancia' del trabajo de la Iglesia a favor de los más necesitados, con obras concretas a favor de personas de cualquier condición 'que merecen ser sostenidos no sólo en sus necesidades materiales, sino acogidos con afecto y comprensión'.
'Sabes que cuentas con la cercanía del Papa y la fraterna oración y colaboración de otras Iglesias particulares diseminadas por el mundo entero', concluyó Benedicto XVI.