La ex rehén de la guerrilla colombiana Ingrid Betancourt pidió hoy en Nicosia, capital de Chipre, trabajar por la unidad en Colombia a fin de que el país latinoamericano se convierta en una democracia real.
Al participar en un simposio internacional interreligioso organizado por la comunidad católica en Chipre, Betancourt lamentó que persista en su país un 'juego político basado en el odio de uno y el rechazo del otro' entre el presidente Álvaro Uribe y la guerrilla.
En Colombia existe una polarización extrema y es necesario que los colombianos aprendan a trabajar juntos en favor de la unidad para que la democracia sea real en el país, dijo la política franco-colombiana.
Aunque la nación sudamericana vive un proceso democrático interesante 'debe ir más lejos', puntualizó la ex candidata presidencial en su intervención en la mesa redonda 'América Latina: por una civilización de paz'.
Betancourt confirmó que por el momento no tiene la intención de volver a Colombia, ya que 'no quiero participar en una democracia que me parece incompleta, ni en ese juego político', según reportes del diario chipriota Cyprus Mail.
Colombia aún tiene frente a sí retos como la droga, las reformas y los paramilitares, subrayó tras recordar que ella misma fue víctima de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
'Si estoy aquí hoy es porque salí de los bosques amazónicos tras un largo viaje a lo profundo de la guerra, pero mi vida ya no es igual pues sobre mi espalda llevo el cautiverio de más de tres mil compañeros míos secuestrados', agregó.
'La guerra es sólo sufrimientos, años de soledad y muerte, humillaciones y vejaciones. Y luego son los recuerdos los que nos persiguen', concluyó.
