Felipe Calderón de manera particular refrendó su compromiso con los que menos tienen. (Archivo)
El presidente mexicano señaló que sólo con unidad podrán superarse los graves problemas que el país enfrenta, por lo cual exhortó a dejar de lado ideas y prejuicios que dividen.
Ha llegado la hora, expusó Felipe Calderón ante el gobernador Enrique Peña Nieto, de estar unidos partidos políticos, y grupos sin distingos regionales, religiosos o partidistas.
Al inaugurar la carretera de San Francisco Tlalchichilpa-Rincón de los Pirules, que estrenó conduciendo un vehículo por un tramo pequeño y tuvo como copiloto al gobernador, también entregó recursos del programa Coinversión Social ante más de cinco mil personas.
Felipe Calderón Hinojosa expresó: "Ha llegado la hora, mexiquenses, de que las mexicanas y mexicanos entendamos tantos problemas tan graves como los que tenemos, como es el problema de la miseria, del desempleo, de la inseguridad, así como el problema del agua y del medio ambiente", los cuales sólo con unidad podrán ser vencidos.
Acompañado también por su esposa Margarita Zavala, explicó que para multiplicar la eficacia de los programas sociales que van dirigidos a la gente más pobre se deben dejar de lado ideas y prejuicios que dividen.
Ejemplificó que durante su campaña se llegó a decir que si él era presidente desaparecerían los programas Oportunidades y Procampo, y no sólo no desaparecieron sino que incluso se reforzaron pues "estos programas deben de seguir".
"Estamos aquí juntos, independientemente de nuestro origen partidista, porque tenemos una causa común y esa causa no es otra cosa que el pueblo de México y del estado de México", manifestó el mandatario.
Entre aplausos de mazahuas, quienes le obsequiaron un chaleco y una banda tradicional de su comunidad al igual que al gobernador Peña Nieto, Calderón Hinojosa dejó en claro que los programas sociales deben seguir adelante porque apoyan a la gente pobre.
De manera particular refrendó su compromiso con quienes habitan este municipio pues su gobierno "tiene un compromiso con los que menos tienen, porque la idea de que el gobierno sea para que la gente pueda vivir mejor se encarna precisamente en la gente que más lo necesita.
Señaló además que continuará con esta gente por una razón muy personal, "porque sí me pesa el hecho de que este municipio, y con pleno respeto a las creencias de todos, porque este municipio está encomendado al mismo santo al que yo fue encomendado.
"Y no puedo olvidarme de un municipio que se llame San Felipe, así que aquí seguiremos trabajando", agregó al despedirse de los vecinos de "san tocayo del Progreso".