La actriz Ana Cecilia Anzaldúa vista la Casa Hogar para Varones del DIF Nacional y Fundación CIE. (El Universal)
El Universal
MÉXICO, DF.- Sumar un año más de vida, tener una discapacidad y hasta tener rasgos indígenas son motivo suficiente para que los niños de diferentes casas cuna de la ciudad de México sean discriminados y no consigan el anhelado sueño de ser adoptados.
Según Mercedes Landa, integrante del Consejo de Adopción del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), la inmadura cultura de la adopción en nuestra sociedad se ve contaminada por la discriminación, un mal que daña a los menores tanto como el abandono o el maltrato que los llevó a ser parte del universo de menores en espera de familia.
Sin embargo, con la finalidad de brindar una sonrisa a niños y adultos mayores, la Casa Hogar para Varones del DIF Nacional y Fundación CIE, con el programa de beneficencia pública Creamos Alegrías, brindaron una celebración a la cual asistió la protagonista del musical Bella y Bestia, Ana Cecilia Anzaldúa. El auditorio de la Casa Hogar dio espacio para la asistencia de las casas cuna de las delegaciones Coyoacán y Tlalpan, además del Centro Amanecer para niños y los asilos Arturo Mundet y Vicente García Torres.
Mientras los aplausos y el entusiasmo de los asistentes iba creciendo, Bella caminaba hacia el escenario con un vestuario colorido, luego de ser presentada ante el público, que en su mayoría eran contrarios en edad pero idénticos en júbilo.
Cuando la actriz preguntó a los niños si conocían el cuento “La bella y la bestia”, la respuesta no se hizo esperar y Anzaldúa comenzó el relato.
“Bestia no sabe leer, entonces Bella lee en voz alta algunos cuentos para él. Por eso estoy aquí, estoy encantada”, aseguró la actriz sobre las razones de su presencia en el evento. Ni siquiera había terminado el ‘Erase una vez, en una tierra lejana...’, cuando Bella logró captar la atención de propios y extraños, pues aún cuando en el musical podemos apreciar una producción espectacular, bastó sólo un tímido micrófono para cumplir el cometido.
A pesar de tener el apoyo visual de diapositivas presentadas en dos pantallas a su costado, Ana Cecilia dejó en claro su posición como protagonista del musical que el pasado ocho de diciembre tuviera como padrino de 100 representaciones a Benny Ibarra.
“Dimos muchísimas funciones en diciembre, nos vio muchísima gente. Y ahora que ya es enero, mes en el que le cuesta trabajo a las personas gastar dinero, el teatro está llenó”, afirmó la actriz, además de reiterar los llenos totales que ha tenido la obra.