Más agua les llegó a los pobladores de los ejidos La Luz, La Partida, Rancho Grande y Guadalupe Victoria, pero ahora a través de máquinas potabilizadoras instaladas por las autoridades de la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento de Coahuila (CEAS).
Juan Manuel Olvera del ejido Guadalupe Victoria, informó que el sábado pasado se presentó ante ellos, Emilio Bichara Marcos, con un grupo de técnicos, quienes fueron los encargados de instalar el aparato enfrente del cerro Guadalupe.
“El funcionario nos explicó que después de que esta contingencia haya terminado, entonces sí nos cobrarán el garrafón a tres pesos, mientras tanto, gozaremos de manera gratuita del agua purificada”, expuso el señor.
La amas de casa son las que demostraron más alegría por esta situación, incluso aún más las señoras con niños pequeños, como es el caso de Enedina Sánchez, quien expuso que es madre de dos infantes, uno de dos años y otro de nueve meses.
“Yo la quiero más que para mí, para mis hijos, pues están pequeños y su pancita es muy delicada, así que ahora voy a preferir mejor preparar el biberón para el más chico con esta agua purificada”, comentó.
También la gente de los ejidos San Lorenzo y Santa Mónica de San Pedro, Coahuila, tuvieron el mismo apoyo, las máquinas potabilizadoras ya funcionan ahí y están al servicio de todos de manera gratuita mientras esté presente la eventualidad por el río Nazas.
Benjamín Acosta de Santa Mónica confirmó que el propio Bichara Marcos les llevó la máquina. “Tengo entendido que en La Luz, La Partida, Rancho Grande y Guadalupe Victoria, también hizo lo mismo, además, aquí en nuestro ejido, pusieron una cocina para que todos podamos tener comida segura mientras pasa lo de la avenida”.
Sobre la situación del agua del río Nazas, el señor informó que el nivel del agua bajó unos 50 centímetros, pero que por recomendación de la Comisión Nacional del Agua (CNA), aún se siguen cuidando y reforzando los bordos.
“Es que mientras esta laguna no sea desfogada, está en peligro que se revienten las protecciones, pero esperamos que no suceda, por eso la gente aún está trabajando y vigilando el río”, informó Benjamín.
Sin clases
En el ejido Guadalupe Victoria, los niños de educación preescolar y básica no han tenido clases desde el día en que se presentó la contingencia por el río Nazas, porque los maestros no han acudido al plantel.
“Al principio por el temor de una inundación estuvo bien visto por nosotras las madres de familia, pero ya es tiempo de que regresen, más ahora que la situación está más controlada”, informó Sanjuana Escobedo de dicho poblado.
Expuso que la justificación de los profesores es porque algunos caminos quedaron incomunicados, “pero eso no es verdad, porque por el lado de Matamoros -por el ejido La Luz-, está el camino de terracería e incluso, hasta si quisieran, se vendrían a través de las lanchitas que por cinco pesos hacen los traslados”.
