SE DEFENDIÓ. Néstor dijo que él no intentó abusar de la joven, fue un malentendido.
Cuando fue a cobrar el dinero de una mercancía que había dejado para su venta en el minisúper Los Nogales, ubicado en la colonia Real del Sol de Torreón, un joven fue sorprendido al intentar abusar de una muchachita.
Pidió auxilio
Néstor Figón Lerma llegó hasta el minisuper, donde se encontraban Telma Hernández y su hija, en la parte delantera de la tienda. En el fondo, arreglaba el baño Anselmo León. Telma salió para buscar el dinero de la mercancía y dejó sola a su hija en la tienda.
Según la jovencita, Néstor aprovechó para abrazarla y empezarla a tocar en todo su cuerpo. Al mismo tiempo, intentó quitarle la ropa. En medio de los forcejeos, la ofendida pegó un grito desesperado para pedir ayuda.
Lo sometió
Anselmo alcanzó a escuchar los gritos de la joven y de inmediato salió corriendo hasta la tienda.
Al ver lo que pasaba se le echó encima a Néstor para someterlo mientras que la muchacha pedía la presencia de unos policías para que detuvieran a su agresor.
En ese momento llegó Telma, quien pidió que Néstor se quedara encerrado en la cárcel.