La rusa Elena Isinbayeva durante la final femenina de salto de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, en el Estadio Nacional de Pekín, China. (EFE)
La saltadora con garrocha, la rusa Yelena Isinbayeva, no sólo se llevó la medalla de oro en esta prueba, sino la noche al imponer nuevo récord mundial de la especialidad, en los Juegos Olímpicos Beijing 2008, con un dramático salto de cinco metros con cinco centímetros.
El casi lleno estadio "Nido de Pájaro" se le entregó a la saltadora y le rindió tributo a la reina en esta prueba, y quizá del atletismo en la cita china, quien supo agradecer el reconocimiento a su esfuerzo y a sus logros con la ya tradicional vuelta olímpica enviando besos y saludos a su público.
La atleta había obtenido la medalla áurea para su país con 4.85, luego que su rival, la estadunidense Jennifer Stuczynski, falló en su intento por saltar los 4.90, para quedarse con 4.80 metros que le valió la medalla de plata.
Ya con el oro en sus maletas, Isinbayeva se sintió con el ánimo para ir por el récord olímpico y lo superó en su tercer intento al marcar 4.95.
Sin embargo, después decidió que iría por la marca mundial que estaba en su poder y era 5.04 y la rompió en el tercer intento para dejarla en 5.05, lo que a su vez le valió para dejar atrás el 4.85 y llevarse el oro con este registro.
De esa manera, además, la carismática saltadora con garrocha hizo que su intento por la plusmarca olímpica quedara de lado y lo que hizo esta noche en el "Nido de Pájaro" quedó para la historia.