¿Qué sigue? Desde el 1 de julio pasado la Corte revisa las demandas que promovieron los partidos chicos en contra de la reforma mediante la cual se creó el nuevo código electoral federal, en el que se establecieron las reglas a seguir para las próximas elecciones. ■ 1. Una vez que la Corte resuelva en definitiva las demandas contra el Cofipe y notifique de su decisión al Congreso de la Unión, ninguno de los partidos que formen coaliciones para las futuras elecciones podrán pactar la transferencia de votos para mantener el registro. Cada partido, por su propia cuenta, tendrá que sumar el 2 por ciento de la votación nacional que se requiere para conservar su registro ante el IFE. ■ 2. La Corte continuará con la revisión de los criterios establecidos en el Cofipe para distribuir entre los partidos políticos los tiempos oficiales de radio y televisión. Así como con la prohibición a los partidos y los particulares para contratar o adquirir, por sí o por terceras personas, tiempos en cualquier modalidad de radio y televisión.
Los partidos chicos fueron los que generaron la anulación de la cláusula de ‘vida eterna’.
Los partidos chicos se suicidaron. La estrategia legal les falló y ellos mismos generaron que la Suprema Corte de Justicia de la Nación anulara, por inconstitucional, la llamada cláusula de “vida eterna” establecida en el Código Electoral Federal, que les permitía recibir votos de los partidos mayoritarios para conservar su registro ante el Instituto Federal Electoral.
Los partidos Convergencia, Del Trabajo, Verde Ecologista, Nueva Alianza y Alternativa Socialdemócrata le pidieron a la Corte que declarara inconstitucional todo el régimen de coaliciones establecido en el nuevo Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe), vigente a partir del 14 de enero del presente año, porque en su opinión, sólo beneficia a los partidos mayoritarios.
Pero después de revisar sus demandas, de manera unánime, los ministros de la Corte concluyeron que el único punto del nuevo régimen de coaliciones que atenta contra la Constitución, es el que, precisamente, los beneficiaba.
Tal como lo había previsto el ministro Fernando Franco, sin mayores problemas y en menos de media hora, el Pleno de la Corte declaró inválida la cláusula, contenida en el quinto párrafo del Artículo 96 del Cofipe, que permite que, en los casos de coaliciones, el partido que obtenga más votos pueda ceder parte de sus sufragios a otro u otros de los partidos con los que se aliaron para que alcancen 2% de la votación nacional que se requiere para mantener su registro ante el Instituto Federal Electoral (IFE).
La decisión marcará el fin de las coaliciones, sentenció el ministro Genaro Góngora Pimentel, quien también vaticinó que la medida adoptada por el máximo tribunal –con voto unánime del Pleno, incluido el suyo- “conllevará con seguridad a la destrucción de los partidos chicos”.
Durante la discusión Góngora pidió, como lo solicitaron los partidos, que se declarara inconstitucional todo el nuevo régimen de coaliciones, en el que también se establece que los institutos que se alíen no podrán aparecer con una misma imagen en las boletas electorales, sino que cada quién saldrá con sus propios logotipos, a fin de que los votos que reciba cada partido se cuenten por separado –para ver si alcanzan los sufragios suficientes para mantener su registro-, aunque al final todos se sumen al mismo candidato.
En opinión de Góngora los partidos chicos tenían razón en pedir que se declarara inconstitucional todo el régimen de coaliciones, porque en la práctica se trata de un contrato “leonino y lesivo” para los partidos de minoría, que atenta contra la democracia y las minorías.
Por este motivo le pidió a sus compañeros de la Corte que declararan inconstitucional todo el régimen de coaliciones y no sólo la llamada cláusula de vida eterna, pero la mayoría de sus compañeros consideró que sus argumentos no tenían fundamento jurídico. Y al final, él mismo terminó por retirar sus observaciones y por sumarse al resto de sus compañeros, para emitir una decisión unánime en contra de la llamada cláusula de “vida eterna” para los partidos chicos.
Las reacciones
La decisión de la Corte provocó reacciones diversas entre los partidos políticos, pues mientras el PAN lo celebró; el PVEM, Convergencia y Alternativa aseguraron que a ellos no les afecta, porque están seguros de permanecer en la vida política con su propio trabajo y estructuras.
En la Cámara de Diputados, el presidente de la Comisión de Gobernación, Diódoro Carrasco (PAN), aseguró que es saludable que la Corte anulara la fracción quinta del Artículo 96 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
“Esa decisión dará firmeza a la reforma constitucional en materia electoral que aprobamos y la ‘blindará’ en su conjunto”, dijo.
El senador Arturo Escobar, secretario de Elecciones del PVEM, lamentó la decisión de la Corte al señalar que es un retroceso para la democracia mexicana.
“El verdadero tema no es la vida eterna de los partidos, sino cómo los partidos históricos (PRI, PAN y PRD) quieren acabar con las alianzas y coaliciones... Hoy se da santa sepultura a las alianzas y coaliciones”, sostuvo,
Alejandro Chanona, coordinador de Convergencia en la Cámara, señaló que su partido político, con nueve años en el espectro político, tendrá capacidad para mantener su presencia en el Congreso y ampliará su posibilidad de gobernar a más mexicanos, de otra manera sería una simulación.
Chanona Burguete dijo que en 2009 ningún partido emergente irá en alianza, porque no habrá un estímulo para ir con un partido mejor posicionado.
Luciano Pascoe, vicepresidente de Alternativa, abundó que el fallo de la Corte atiende una preocupación clara, pero al mismo tiempo pone a los partidos en una nueva disyuntiva porque a cuatro meses de que inicie el proceso electoral de 2009 no hay claridad de cómo va a quedar esa Ley.