Cada vez es más difícil para las familias promedio acceder a algunos alimentos, como la carne.
EL SIGLO DE DURANGO
VICENTE GUERRERO, DGO.- A pesar de que los precios de la carne no aumentan, el número de consumidores disminuye ante la difícil situación económica de las familias de asalariados.
Las ventas en las carnicerías en general bajaron 45 por ciento, en promedio, de diciembre a abril; ante la situación, este producto se está convirtiendo en prohibitivo para los pobres.
ENTREVISTAS
Rosa Hermosillo, ama de casa, señaló que ella compra molida, pulpa y cocido, que es la carne más económica; la consumen en su hogar tres veces a la semana.
Al igual que doña Rosa, Narciso Herrera, de oficio de bolero, compra carne de la popular, medio kilogramo de molida o pulpa con mucho esfuerzo, pues gana alrededor de 80 pesos diarios para sostener a su esposa y dos hijos.
Otros obreros prueban la carne una vez por semana y los hay que lo hacen cada 15 ó 30 días, pues aunque no aumenta la carne, la canasta básica ha subido mucho de precio, mientras el salario se incrementa sólo 1.50 pesos.
José Daniel Ramos Ramos, policía municipal, comentó que compra carne cada fin de semana, la más económica y en poca cantidad, pues su salario es de dos mil 200 a la quincena para sostener a su esposa y un hijo.
CONSUMEN MENOS
Evidentemente, se reducen las ventas en las carnicerías. En el Mercado Municipal Abel Núñez, de Vicente Guerrero, los tablajeros como Hugo Esparza señalaron que las ventas han sido muy malas en lo que va del año, pues las mejores las tuvieron en diciembre.
Poca gente es la que compra carne; la mayoría lleva de 15 a 20 pesos, pues no hay dinero para tanto lujo en estos tiempos, dicen los entrevistados.
Además, mencionó que los precios se mantienen igual como la molida especial a 56 pesos el kilogramo; la deshebrada y la pulpa también al mismo costo; la chuleta a 54 pesos, el cocido se cotiza a 40 pesos, la costilla a 36 y el hígado a 25 pesos.
Mientras tanto, Jorge Esparza coincidió en que ahorita hay un desplome en la venta de carne, pues dijo que vende de 350 a 400 pesos diarios, cuando no hace mucho lograba 700 a 800 diarios, y no se debe al precio ya que es el mismo de hace cuatro años.
DIFERENCIAS
Por su parte, Esteban Rosales Rodríguez manifestó que en su carnicería en diciembre vendía de dos mil a dos mil 500 pesos diarios y desde enero a la fecha han bajado las ventas un 60 por ciento. Cuando mucho, el promedio de comercialización diaria es de 800 pesos.
Aunque la mayoría de los carniceros entrevistados en el mercado coincidieron en el desplome de las ventas, algunos como Calilos Bar solamente resienten un 30 por ciento con relación a diciembre, es decir de nueve mil bajó a siete mil pesos diarios.
“Es buena venta a como está la crisis -dice Reynaldo Mier- pues este negocio se sostiene en todas las temporadas, buenas o malas; la clave está en la calidad. Aquí se ofrece pura carne de primera calidad”.
15
pesos
de carne de la económica compra la mayoría
veces
por semana comen carne las familias en Guerrero
