“El Sol” no estuvo acompañado ni por Araceli Arámbula ni por su hija, Michelle Salas. (El Universal)
Luis Miguel nuevamente volvió a “iluminar” Las Vegas, al ofrecer el primero de sus cinco conciertos en esta ciudad. El cantante mexicano derrochó energía en el escenario, el cual contó con un gran juego de luces y pantallas gigantes que no sólo proyectaban su imagen, sino varios videos musicales que ha grabado.
“¿Cómo están? Qué bueno es estar nuevamente en Las Vegas”, dijo Luis Miguel, “la primera vez que me presenté aquí fue cuando tenía 15 años y la verdad tengo recuerdos muy buenos desde aquel tiempo”.
Luis Miguel inmediatamente se ganó el cariño y aplauso del público, que no cesó de ovacionarlo en las dos horas que duró el espectáculo.
Aunque se esperaba la presencia de Michelle y de Aracely Arámbula, a ninguna se le vio.
El artista brindó un show más movido que en años anteriores, ya que en esta ocasión su repertorio estuvo conformado básicamente con temas bailables y no tanto boleros.
El mariachi no podía faltar en estas fechas patrias y fue “El Sol de México”, de José Hernández, quien acompañó a Luismi en el estrado.
El publico, a garganta abierta, interpretó temas como La Bikina y Mexico en la Piel, entre otros.
El cantante lució varios cambios de ropa, pasó del tradicional traje negro con corbata del mismo color a un vestuario de saco blanco y pantalón negro. Al final, utilizó una camisa roja con rayas negras.
Con este espectáculo, Luis Miguel inició la serie de conciertos que tendrá en Las Vegas y que formarán parte de su nueva gira “Cómplices”, la cual arrancó hace varias semanas en algunas ciudades de Estados Unidos.
Este lunes 15 de septiembre dará el Grito en esta ciudad, y se espera que acudan varias celebridades latinas.