El presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, acudió ayer a depositar su voto en la segunda vuelta de los comicios presidenciales.
Señalan que militantes leales al Gobierno acosaron a la población para que acudiera a emitir su voto
Una baja participación de votantes y el acoso a la población por parte del Gobierno de Robert Mugabe, caracterizaron la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas ayer en Zimbabwe.
Mugabe participó en solitario en estos comicios debido a que su rival, el líder del opositor Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), Morgan Tsvangirai, se retiró el pasado domingo a consecuencia de la campaña de intimidación contra sus seguidores que incluyó ataques y asesinatos llevada a cabo por el Gobierno.
A primera hora de la mañana, tan sólo alrededor de diez personas esperaban la apertura de los colegios electorales más céntricos de Harare para poder votar, mientras que en otras localidades se comenzó a recibir votantes una hora después de su apertura a las 07:00 hora local (05:00 GMT).
Esto contrastó con la jornada de la primera ronda, el pasado 29 de marzo, en la que horas antes de la apertura de los colegios, cientos de personas esperaban su turno para votar.
El Gobierno de Zimbabwe trató de minimizar la escasa asistencia de electores e informó a través de la radio nacional acerca de una “respuesta masiva” en las provincias de Mashonalandia y Manicalandia, feudos tradicionales de la gubernamental Unión Nacional Africana de Zimbabwe-Frente Patriótico (ZANU-PF).
Durante todo el día, grupos de militantes de la ZANU-PF dirigidos por veteranos de la guerra de independencia de Zimbabwe y otras unidades paramilitares leales al Gobierno recorrieron las calles de Harare acosando a los transeúntes para que concurrieran a votar.
En el distrito trabajador de Mbare de esta capital, que tradicionalmente apoya a Tsvangirai, el grupo “Chipangano” (Nuestro acuerdo, en idioma shona), perteneciente al ala juvenil de la ZANU-PF, fue casa por casa para obligar a la barriada a concurrir a las urnas.
No se recibió información acerca de agresiones, pero algunos votantes, que pidieron el anonimato, admitieron que la presión era muy fuerte y tuvieron que votar por Mugabe por que los funcionarios de la ZANU-PF en los colegios exigían ver las papeletas antes de que fueran introducidas en las urnas.
Poco antes de que abrieran los colegios electorales, Tsvangirai hizo un llamamiento al boicot de las elecciones, aunque puntualizó que la gente debía votar si sentían que sus vidas corrían peligro.
“Si es posible, os pedimos que no votéis”, dijo Tsvangirai en una carta que el MDC hizo circular en Harare y otros centros urbanos del país, “Pero si os veis obligados a votar por Mugabe porque vuestras vidas están en peligro, hacedlo”, añadió.
El líder opositor subrayó en el documento que la población no debe preocuparse de los resultados de esta segunda vuelta de las presidenciales.
“Cualquiera sea el resultado, el mismo no será reconocido por el mundo. No importa que seáis forzados a votar por Mugabe, nosotros sabemos lo que tenéis en el corazón. No arriesguéis vuestras vidas. La victoria del pueblo podrá ser demorada, pero no será negada”, afirmaba la misiva de Tsvangirai.
Prepara sanciones el Consejo de Seguridad
El Consejo de Seguridad de la ONU lamentó ayer “profundamente” que el Gobierno de Zimbabwe decidiera llevar a cabo las elecciones presidenciales, pese a que no existían las condiciones para unos comicios “libres y justos”.
El presidente de turno del Consejo, el embajador de Estados Unidos, Zalmay Khalilzad, aseguró que sus 15 integrantes acordaron ayer reafirmar su declaración del pasado 23 de junio, en la que condenaron la violencia ejercida contra la oposición zimbabwense.
“El Consejo acordó que las condiciones para unas elecciones justas y libres no existen y lamenta profundamente que las elecciones se produjeran bajo estas circunstancias”, dijo Khalilzad a la salida de una reunión del máximo órgano.
Recordó que el Consejo espera recibir un informe del secretariado de la ONU sobre la situación en esa región de África tras las elecciones celebradas ayer y adelantó que volverán “a tocar este tema en los próximos días”.
Posteriormente, en calidad de representante de EU, Khalilzad señaló que Washington ya ha iniciado los contactos con otros países miembros del Consejo para redactar una resolución con sanciones específicas contra el Gobierno del presidente zimbabwense, Robert Mugabe, si “las condiciones siguen iguales”.