Cientos de personas marchan hoy, 6 de marzo de 2008, en Bogotá (Colombia), durante una manifestación contra la violencia en la cual participan víctimas de los paramilitares y de agentes estatales. (EFE)
Bajo una pertinaz lluvia, miles de colombianos salieron hoy a las calles para marchar en contra de los grupos paramilitares de ultraderecha y todas las expresiones de violencia que han afectado por cuatro décadas al país andino.
Con imágenes de decenas de desaparecidos por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), estudiantes, campesinos y trabajadores iniciaron este jueves sus recorridos para 'exigir verdad, justicia y reparación' por los crímenes del paramilitarismo.
En la capital colombiana, las marchas comenzaron poco después de las 10:30 hora local (15:30 GMT) y bajo una fuerte custodia policial avanzaron hacia la céntrica Plaza de Bolívar, donde está prevista la mayor concentración de la jornada.
La Alcaldía de Bogotá, que se unió a la movilización pacífica, colgó en la fachada del edificio un gigantesco aviso con las fotografías de políticos muertos o desaparecidos en medio del conflicto armado interno que vive el país desde hace 43 años.
'Allí tenemos una pancarta en la fachada, con una leyenda por los desplazados, sí a la justicia; por los desaparecidos, sí a la verdad; por los asesinados, sí a la reparación', afirmó el alcalde de Bogotá, Samuel Moreno.
La gran movilización fue convocada en febrero pasado por el Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado, y poco a poco logró el apoyo de estudiantes, organizaciones sociales y sindicatos.
El promotor de la protesta y cuyo padre fue asesinado en 1994 por los paramilitares, Iván Cepeda, dijo a periodistas que tiene información de una nutrida participación ciudadana en 20 ciudades colombianas.
Las marchas, que también se realizarán en otras ciudades del mundo, buscan rendir homenaje a 3.5 millones de desplazados y a miles de desaparecidos en acciones que organismos sociales atribuyen a los paramilitares, en proceso de desarme desde 2004.
A la jornada se han sumado países de Europa y Latinoamérica, donde Organizaciones No Gubernamentales (ONG) convocaron a los colombianos residentes en el exterior a marchar en favor de las víctimas de la violencia en Colombia.
La movilización tuvo un tímido respaldo del gobierno colombiano y los empresarios, que el 4 de febrero pasado dieron un amplio apoyo a las marchas para exigir la libertad de los rehenes en poder de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La organización insurgente retiene a 750 personas, incluidos 40 militares y políticos que esa guerrilla busca canjear por unos 500 rebeldes en prisión, en el marco de un acuerdo humanitario.
Colombia arrastra un conflicto armado desde hace cuatro décadas, que protagonizan rebeldes, paramilitares y agentes estatales, cuya confrontación ha dejado más de 100 mil muertos y 3.5 millones de desplazados, según estimaciones oficiales.
