Un recién nacido fue asesinado de 44 tijerazos por sus padres, presumiblemente poco después que su madre diera a luz en su domicilio de la ciudad de chilena de Valparaíso, informó la policía.
Los hechos ocurrieron en la madrugada y según la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de Carabineros, la joven madre (18 años) y su pareja cometieron el crimen apenas la mujer dio a luz.
El delito quedó al descubierto en el Hospital Van Buren, de Valparaíso, cuando la abuela del bebé llegó con el cuerpo dentro de una bolsa de basura, argumentando que su hija había sufrido un aborto, lo que fue descartado de plano por los médicos.
La niña, de 39 semanas de gestación, presentaba un total de 44 lesiones punzantes en la cabeza, cara, tronco, cuello, abdomen y extremidades.
Según estableció la policía, habría sido la madre, identificada como Alejandra Zamora Henríquez, quien tomó una tijera, cortó el cordón umbilical y le propinó a la bebé dos heridas punzantes.
Después, el padre de la menor, Jonathan Gatica Palacios, de 25 años, con la misma tijera le provocó al menos cuarenta heridas punzantes en la cabeza, tórax, abdomen y extremidades.
Tanto Alejandra Zamora Henríquez como su pareja fueron formalizados por el delito de infanticidio y quedaron bajo prisión preventiva.