EL ISSSTE recomienda no dar mucho medicamento a las personas ancianas ya que puede ser perjudicial.
Aun cuando el uso de medicamentos es reconocido como importante auxiliar para preservar la calidad de vida de los ancianos, también constituye un factor de riesgo que puede afectar su salud o agravar sus padecimientos si no se consideran cuidados, estudios y análisis en la prescripción a una persona de la tercera edad.
Por lo tanto, es indispensable estudiar los cambios que sufre el organismo con el proceso de envejecimiento y los efectos que tienen los fármacos, manifestó Manuel Iván Moscoso Rincón, subdelegado Médico del ISSSTE.
Precisó que es necesario considerar tres factores primordiales para cuidar la salud de los ancianos: por un lado, el proceso de envejecimiento, que incluye una serie de cambios que en el organismo conforme avanza la edad; la o las enfermedades que padece, y la suma de medicamentos que emplea para tratarlas. Como el adulto mayor es, por lo común, portador de varias enfermedades, se le proporciona una gran cantidad de medicamentos, que consume en forma simultánea, lo cual puede representar más un perjuicio que beneficio.