Con una asombrosa ejecución en el sexto salto, el mexicano Yahel Castillo se clasificó a la final del trampolín de tres metros en los clavados de los Juegos Olímpicos. (Fotografía cortesía de Conade)
El clavadista mexicano Yahel Castillo avanzó a la final en la prueba de trampolín de tres metros, al ubicarse en el cuarto sitio con una buena actuación que hace soñar a su país con otra medalla en los Juegos Olímpicos Beijing 2008.
Después de realizar sus seis clavados, Castillo totalizó 504.55 puntos para ubicarse en el cuarto lugar detrás del chino Chong He, del canadiense Alexandre Despatie y del también local Kai Qin.
En su primer lance, el clavadista mexicano inició flojo y su calificación fue de 76.50 que lo ubicó momentáneamente en el sitio 17, pero en su segundo salto mejoró considerablemente al conseguir 83.70 que lo catapultó al quinto puesto.
Para su tercer intento Castillo mostró su irregularidad al realizar un clavado de dos y media vueltas atrás en donde se pasó, y los jueces no lo perdonaron al otorgarle un 66.00 que lo colocó en el decimoquinto puesto.
En el cuarto salto el atleta mexiquense mejoró de manera formidable con respecto al tercero, pues recuperó terreno al conseguir un 82.25, y en el quinto clavado el joven de 21 años mostró su enorme habilidad y obtuvo un 92.75 que lo ubicó en el segundo sitio momentáneamente.
Castillo amarró su calificación a la final cuando colocó un clavado de 103.35 puntos que le permitió avanzar a la pelea por las medallas en el cuarto lugar.
“Me sentí muy diferente a todas las competencias que he tenido, ahora ya sé qué es lo que es estar en unos Juegos Olímpicos. Sí habíamos trabajado para esto, era lo que yo quería”, aseveró Yahel Castillo.
“Es muy diferente a lo que yo esperaba, mi entrenador (Jorge Rueda) lleva nueve Juegos Olímpicos y me platicaba, pero había cosas que yo no le creía hasta que llegué aquí”, finalizó.
Por la mañana, Yahel había dado señas de que tenía material para disputar su primera final olímpica al situarse en el tercer lugar. Aunque falló el mismo clavado que el de anoche, por lo que para ganar una medalla tendrá que poner especial cuidado en esa ejecución, el dos y media en B.
