Este sábado que pasó René y Pilar celebraron sus bodas de oro de casados.
Alguna complicidad deben haber pactado con el tiempo, pues ambos se ven muy bien: él todavía tiene la presencia de aquel galán que fue en nuestros tiempos de colegio, y ella se ve tan guapa como en su juventud de muchacha saltillera.
La fiesta tuvo espléndido marco de montañas. La buena mesa, la buena música y la buena amistad fueron regalos de la tarde.
René Silva... Pilar Dávila... Amigos que son ejemplo de buen amor y vida buena. La hermosa familia que formaron da testimonio de lo que ellos son.
El amor a primera vista es muy romántico, pero es más bello el amor de una mujer y un hombre que juntos han mirado pasar los años de la vida, y que los ven ahora igual que el sembrador mira su cosecha.
¡Hasta mañana!...
