HISTORIAS DE LA CREACIÓN DEL MUNDO
Jacob se enamoró de la bellísima Raquel.
La pidió en matrimonio a Labán, el padre de la hermosa joven.
Labán le dijo que si quería desposar a su hija debía trabajar para él, sin paga, durante siete años.
Jacob cumplió la condición: siete años trabajo para Labán. Pero llegado el término Labán le dijo que si en verdad quería a Raquel debía trabajar para él otros siete años sin recibir jornal.
Jacob, enamorado, trabajó otros siete años para el padre de su amada. Completó así 14 años de fatigas.
Finalmente Labán le entregó a la muchacha como esposa.
La noche de las bodas Jacob se acercó a Raquel lleno de amor. Y ella le dijo:
-Esta noche no, querido. Me duele la cabeza.
¡Hasta mañana!...