Dijo el color azul:
-Yo soy el mejor de todos los colores.
Dijo el rojo:
-Te equivocas: el mejor de todos los colores soy yo.
Negó el verde:
-No. Yo soy el mejor color.
Lo mismo dijeron el color anaranjado, el café, el rosa, el amarillo, el morado, y todos los demás.
La verdad es que no hay un color que sea mejor que otro. Todos son diferentes entre sí, y todos son necesarios para formar el rico y variado arco iris de la naturaleza.
Lo mismo sucede con los hombres, las mujeres, los niños.
Todos son diferentes entre sí, y todos son necesarios para formar el rico y variado arco iris de la vida.
¡Hasta mañana!...