QUIZÁ SEAN POCAS las personas que recuerden aquella película del año de 1973 intitulada “Cuando el Destino nos Alcance”. Que fue dirigida por Richard Fleischer e interpretada por Charlton Heston, Edgard G. Robinson y Joseph Cotten.
LA PELÍCULA SE DESARROLLA en la ciudad de Nueva York en el año 2022, dentro de un contexto apocalíptico, negativo y que remarca las secuelas de miseria, pobreza y carestía con motivo de que la humanidad no tiene la manera de producir alimentos, lo que crea un caos mundial y la lucha de los hombres entre sí para poder conseguir los alimentos que los mantengan con vida.
SI LA FALTA DE alimentos para el género humano reviste aspectos escalofriantes para nuestra civilización, el supuesto de la falta del agua potable para que beban los humanos nos acarrearía consecuencias inimaginables. Son los futurólogos los que han afirmado que las guerras del futuro no muy lejano, serán las Guerras por el Agua y que además, estas guerras serán las más sangrientas y deshumanizadas que el género humano haya conocido.
AQUELLOS QUE LLEGUEN a controlar la extracción, manejo, conducción y disponibilidad del vital líquido, serán los seres dominantes y dueños de la voluntad de todos. Frente a estos parámetros las guerras por el petróleo serían verdaderamente insignificantes.
ESTAS REFLEXIONES son consecuencia de la lectura del importante proyecto que don Enrique Vázquez Ávila ha venido encabezando y alentando desde hace más de 40 años, para rehabilitar de manera integral la Cuenca Hidráulica 36, sobre la cual se encuentra asentada nuestra Comarca Lagunera.
EL MEGAPROYECTO se denomina “Plan MEVA” y tiene contemplado la captación de más de 4,500 millones de metros cúbicos de agua, que actualmente se tira en el Océano Pacífico y se pierden además en sierras y cañadas en las partes altas de la Sierra Madre de Durango.
PERO EL PLAN MEVA considera además, la creación de una serie de presas reguladoras y canalizadoras de las aguas a los Ríos San Lorenzo tributarios de Río del Oro finalmente tributarios del Río Nazas; el establecimiento a lo largo de su recorrido de las aguas del Nazas rumbo a la Comarca, de una serie de plantas generadoras de energía eléctrica; la recarga de los mantos acuíferos a la fecha totalmente abatidos y que representan una verdadera bomba de tiempo por los niveles en que se encuentra la extracción de las aguas en zonas arsenicales y que de un momento a otro podrían colapsar causando un problema verdaderamente catastrófico e irreversible al millón y medio de habitantes de esta Comarca.
DON ENRIQUE VÁZQUEZ ÁVILA tiene a la fecha más de 40 años navegando y predicando (ahora sí que literalmente) en el desierto su proyecto. Toca puertas por ahí, por acá, pero nadie toma en serie este gravísimo asuntito, que como van las cosas, el día menos pensado amanecemos sin agua ni para lavar los trastes.
LA REALIDAD es que la Comarca Lagunera está en la grave contingencia de llegar a quedarse realmente sin agua, ya no digamos para sostener su actual nivel de desarrollo agropecuario, por el colapso de los mantos freáticos lo que se traduciría en una contaminación generalizada por arsénico de todos ellos.
EN UN PROBLEMA de esta naturaleza que abarca e incluye a todos y cada uno de los habitantes de esta Comarca, es necesario que todos tomemos conciencia de la necesidad de unirnos para afrontar este problema que tiene el grave riesgo de que puede llegar a suceder.
COMO EN UNA SOLA colaboración me sería imposible explicar en toda su extensión un megaproyecto como lo es el “Plan MEVA”, será en otros “MIRANDO A FONDO” en que se tratará de divulgar este problema que reclama de la atención, el cuidado y la participación de todos los laguneros de uno y de otro lado del Río Nazas, es necesaria la participación de nuestras universidades, de los empresarios, de los gobiernos de Durango y de Coahuila, de los productores agropecuarios y de los industriales, pues el destino nos está a punto de alcanzar.
Comentarios gaasoc@hotmail.com