Ante la situación en los mercados financieros, el sube y baja de tipo de cambio, el aumento en las tasas de interés y la poca confianza de que esto sea temporal, los bancos y sofoles empiezan a modificar las condiciones de sus créditos hipotecarios.
Una muestra es la tasa de interés personalizada, en este caso Scotiabank fue una de las primeras instituciones en proponerla.
Con esta medida ya no existe una tasa para todos los créditos sino que ahora cada cliente calificará y cotizará una tasa personal, entre 11 y 14% anual.
Para ello tomarán en cuentan varios factores, entre ellos la aplicación de un cuestionario a cada cliente que le dará un resultado relacionado con su edad, antigüedad en el trabajo, salario, forma de pago (nómina, honorarios), número de integrantes en la familia, tipo de industria en la que se desarrolle profesionalmente, etc.
Además, entre mayor sea el monto pagado para el enganche de la propiedad la puntuación podrá ser mejor. La propuesta es que si las instituciones califican a sus clientes, los clientes también puedan calificar a los bancos y sofoles.
¿Es tiempo para embarcarse
con una hipoteca?
Mientras los contratos sean con tasa y plazo fijo, y el interesado obtenga una tasa de interés que le sea conveniente, así como un pago mensual que no afecte su capacidad de pago, el adquirir un inmueble con un financiamiento sigue siendo una alternativa para aquellas familias que buscan tener una casa propia.
Para comprar una segunda casa, que pueda ser usada para descansar los fines de semana o vacacionar, definitivamente es mejor esperar y mantener liquidez con el dinero que se tenga para el enganche.
Por último, también vale la pena evaluar qué tan urgente es hacer la operación o bien qué tanto puede esperar, así como considerar las perspectivas de su empleo actual.