TRÁGICO. Al momento del fatal accidente Antonio Cepeda Zamora viajaba como acompañante en la moto.
Con el cráneo destrozado y con múltiples lesiones en su cuerpo, terminó un quincuagenario albañil en pleno centro de la ciudad, tras ser aplastado por los neumáticos traseros de una unidad del transporte urbano, cuando al viajar de acompañante en una motoneta con un menor de edad este le intentó ganar el paso al camión y ocurrió el percance.
Iban al trabajo
El percance se produjo pasadas las 07:20 horas, en el cruce de Juan Aldama y la Calzada Emilio Carranza de la zona centro. Cuando por las prisas y la presunta imprudencia de Miguel Ángel Castillo Carrizales de 17 años, conductor de una motoneta marca Aprisa modelo 2008, sin placas de circulación, le intentó ganar el paso al camión marca Internacional modelo 2004, sin placas de circulación, de la Ruta 4A con número económico 340, que circulaba de sur a norte por Emilio Carranza y que al llegar al crucero intentó dar vuelta al oriente por Juan Aldama.
Tras el desigual choque en el costado delantero de la unidad, el frágil vehículo cayó al pavimento y ambas personas que viajaban en la motoneta fueron arrastradas por la pesada unidad, con resultados trágicos ya que los neumáticos traseros pasaron sobre la cabeza de Antonio Cepeda Zamora de 53 años, según trascendió era originario de General Cepeda y vivía en La Minita, en ese momento viajaba como acompañante en la moto.
Mientras que el joven conductor de la motocicleta, terminó un par de metros adelante y con lesiones graves debido a que presuntamente los neumáticos traseros le pasaron encima.
Poco más tarde, llegaron paramédicos de Bomberos y Cruz Roja que unieron esfuerzos y brindaron los primeros auxilios a Miguel Ángel Castillo, quien se encontraba debajo del camión.
Mientras que al cuerpo de Antonio Cepeda sólo lo cubrieron con una sabana blanca, ya que murió instantáneamente al momento de que las ruedas le destrozaron el cráneo y regaron su masa encefálica por el lugar.
Mientras los minutos transcurrían en espera de la llegada del Ministerio Público, una persona no identificada colocó en la parte trasera de la carroza una pancarta que decía: “Asesinos. No es la primera muerte. Pa’ eso nos cobran más”.
Misma que fue retirada por una mujer que salió de las capillas Martínez, ya que podría perjudicar a su empresa, ya que no fue colocada por nadie de su personal.
Cuando las autoridades de la PGJE, realizaban las investigaciones del accidente y el levantamiento de todo tipo de evidencias para descartar responsabilidades, arribaron al lugar los familiares del hoy occiso que rompieron en llanto al ver la forma atroz con que perdió la vida su pariente.
Al entrevistarse con el fiscal Everardo Rosales, Juan Antonio Cepeda hijo del fallecido, informó que la motocicleta era propiedad de su padre, pero que a diario la manejaba el joven Miguel Ángel, ya que ambos se trasladaban en ella a su centro de trabajo en una constructora donde ambos laboraban como albañiles.
Por tal motivo el Ministerio público ordenó a los municipales poner un oficial de custodio en el hospital donde se encuentra internado el adolescente, mientras se resuelve quien es el culpable del percance y deslindar si el chofer de la combi es responsable o no. También se ordenó el traslado del cuerpo del infortunado alarife a las instalaciones del servicio médico forense para realizarle la necropsia. El chofer de la combi Rogelio Martín Díaz Alvarado de 33 años, quedó a disposición de las autoridades hasta que se deslinden responsabilidades.
