Marcial Maciel, fundador de la congregación religiosa Legionarios de Cristo, y uno de los clérigos mexicanos con mayor prominencia en el mundo católico, murió a los 87 años de edad.
Maciel murió el miércoles en Estados Unidos, de causas naturales, pero la orden difundió la noticia hasta ayer.
Pasó los últimos años en la polémica por acusaciones de abuso sexual a jóvenes. Su muerte llegó casi dos años después de que fue “invitado” por el Papa Benedicto XVI a “llevar una vida reservada de oración y penitencia, renunciando a todo ministerio público”.
Maciel, nacido en 1920 en Cotija, Michoacán, fundó la congregación en 1941 y en 1959 fundó el apostolado laico Regnum Christi. La orden fundó escuelas y universidades y gozó del favor del Papa Juan Pablo II quien ordenó como obispos a dos miembros. A su muerte, la orden cuenta con unos tres mil sacerdotes y está presente en 40 países.
Pero en la década de los 90, investigaciones periodísticas en México y Estados Unidos recogieron denuncias de personas que acusaron a Maciel de haber abusado sexualmente de ellos cuando eran estudiantes.
En 2001, El Vaticano inició una investigación del caso y en 2005, Maciel dejó el cargo de superior de la orden. En 2006 se cerró la investigación sin asignar culpa, pero con la “invitación” para que Maciel dejara el ministerio público.
El sitio de Internet de la congregación informó que, de acuerdo a la voluntad del sacerdote, su funeral se realizará “de forma sencilla y privada”.