Al menos once personas murieron ayer, incluidos un niño de seis años y otro de diez, al naufragar una barca en aguas de la provincia de Iloilo, en la región central de Filipinas, en medio del temporal generado por la aproximación al país de una depresión tropical.
El segundo de la Alcaldía de Concepción, John Arcosa, declaró ayer a la cadena de televisión GMA que han identificado a nueve de las once víctimas mortales y que buscan al resto de las aproximadamente 40 personas que creen viajaban en la embarcación a motor.
El edil señaló que la nave zozobró en medio de un temporal sobre las 13:30 hora local a unos 200 metros de la costa de la isla de Bagongon, a unos 450 kilómetros al Sureste de Manila.
Los pasajeros regresaban a la isla de Olpoc, donde residen, tras comprar provisiones en la isla mayor de Panay porque ayer era día de mercado.
Este nuevo naufragio ocurre dos días después de que otra embarcación se hundiera en el Este de Filipinas con 152 personas a bordo, según testimonios de los supervivientes, debido a la sobrecarga y dejase 42 muertos y ochos desaparecidos.
Los accidentes marítimos son frecuentes en Filipinas, un país formado por unas 7 mil 100 islas, y se deben en general al incumplimiento de las normas de seguridad.
El pasado junio, 810 personas murieron o siguen dadas por desaparecidas al naufragar un transbordador con 725 pasajeros y una tripulación de 141 marinos.
El accidente más grave de la historia de la navegación comercial sucedió el 20 de diciembre de 1987 en Filipinas, cuando el barco de pasajeros “Doña Paz” colisionó con un petrolero y murieron 4 mil 317 personas.
