En la imagen algunos de los cuerpos de los turistas rusos que fallecieron en un accidente de autobús cerca de la ciudad israelí de Eilat. (EFE)
Al menos 30 rusos murieron ayer al volcar el autobús en el que viajaban a unos 30 kilómetros de la ciudad israelí de Eilat, aseguró Piotr Stegniy, embajador ruso en Israel.
Stegniy cifró en 21 a los heridos, la mayoría de gravedad, según informó el canal de noticias “Vesti” (Noticias).
Por otra parte, fuentes de la industria turística de San Petersburgo informaron a las agencias rusas de que los 55 pasajeros del autobús eran empleados de agencias de viajes de la ciudad en visita de promoción a Israel. En un primer momento, medios israelíes informaron que se trataba de turistas rusos.
El primero de los dos aviones movilizados por el ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia despegó a las 22:00 hora local de Moscú con destino a Israel con médicos, psicólogos y equipos sanitarios a bordo.
El Gobierno ruso creó inmediatamente un grupo de gestión de crisis encabezado por el viceministro de Exteriores, Alexandr Grushkó, según la agencia rusa Interfax.
El presidente de Rusia, Dmitri Medvedev, instruyó a los representantes diplomáticos rusos en Israel que ofrezcan toda la asistencia necesaria a los afectados por el siniestro, según informó el Kremlin en un comunicado.
El accidente tuvo lugar a las 15:00 hora local, 90 minutos después de que aterrizara un avión procedente de San Petersburgo en el aeropuerto de Ovda, próximo a Eilat, ciudad situada a orillas del mar Rojo y uno de los principales destinos turísticos de Israel.
El siniestro se produjo a tres kilómetros al Norte de Eilat, cuando el autobús, propiedad de una empresa privada, se precipitó por causas desconocidas en el lecho seco de un río.
Los heridos han sido trasladados en su mayoría a centros hospitalarios de Eilat.