Misiles estadounidenses supuestamente disparados ayer por una aeronave no tripulada hicieron explotar una casa y un seminario relacionados con un importante dirigente Talibán en el Noroeste de Pakistán, causando la muerte de nueve personas por lo menos, dijeron autoridades y testigos.
Las explosiones ocurrieron en un pueblo de Waziristan del Norte, un bastión miliciano en la zona tribal rebelde de Pakistán, que es un probable escondite de Osama bin Laden y el segundo hombre más importante de Al Qaeda, Ayman al Zawari.
Un encargado de Inteligencia pakistaní, que habló bajo condición de anonimato, afirmó que tres presuntos milicianos extranjeros y dos niños se encontraban entre los muertos en lo que aparentemente fue parte de una operación estadounidense contra los refugios para los milicianos en las zonas tribales de Pakistán que colindan con Afganistán.
Los objetivos del ataque estaban vinculados con Jalaludin Haqani, un veterano de la Yihad contra el Ejército soviético en Afganistán durante la década de 1980, que según los militares estadounidenses son algunos de los enemigos más peligrosos.
Se ha relacionado a Haqani y a su hijo Siraj con ataques ocurridos este año, incluyendo un atentado para asesinar al presidente de Afganistán, Hamid Karzai, y un ataque fatal en un hotel de lujo en Kabul. La información sobre las muertes del ataque de ayer eran variados.