Ya no se pudo hacer nada para salvar la vida de un hombre que murió por consumir alcohol con exceso.
Sombrerete, Zac.- La proliferación del alcoholismo en las comunidades cobró otra víctima: Adolfo Herrera Luna, de 56 años de edad, quien falleció.
La alarma cundió entre la pequeña población de Catarinas o Cuauhtémoc, ubicada al noreste de la ciudad, donde las condiciones son de extrema pobreza cuando unas personas encontraron al muerto.
El cuerpo de don Adolfo Herrera fue encontrado alrededor del mediodía, con el sol a todo lo que daba, tirado enfrente de una obra en construcción.
A un costado fue encontrada la causa de su súbita muerte, una botella de plástico de alcohol de ínfima calidad, todavía con restos “ del veneno” en su interior.
El delegado de la comunidad, César Aldaba Morán, de 34 años, dio aviso a las autoridades del Ministerio Público, quienes dieron fe de los hechos.
Aldaba señaló que el alcoholismo ha aumentado en su comunidad y no existe control del mismo, ya que se vende tanto a personas adultas como a menores.
Congestión.
El hígado es incapaz de filtrar la cantidad de alcohol que ingresa al organismo. Hay deshidratación, irritación del tracto gastrointestinal, disminuye la presión, la temperatura del cuerpo, hay vómito, temblor, confusión mental y estado de coma al final.
Por Brisia Arlette Ramírez
