El IMSS invita a comer con moderación en esta época, sobre todo los alimentos con mucha grasa.
Resultados / Después de las fiestas llegan los problemas de salud.
Durango. De tres a cinco kilos puede aumentar de peso una persona por los platillos típicos de Navidad y fin de año, pues contienen una cantidad considerable de calorías.
Juan Manuel Ávila, coordinador de Nutrición y Dietética del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), comentó que para prevenir esta situación y evitar complicaciones de salud en personas que padecen enfermedades crónico-degenerativas se recomienda sustituir o reemplazar ingredientes de manera parcial o total por otros menos energéticos.
La crema, mayonesa, jamón de cerdo y aderezos pueden ser sustituidos por aceite de oliva, jamón de pavo y yogur natural, además se debe incrementar la ingesta de vegetales, frutas y legumbres ya que es benéfica para el corazón.
Ávila enfatizó en que los pacientes con diabetes, hipertensión y obesidad deben evitar los excesos ya que durante esta temporada aumentan las consultas en los servicios de urgencias de personas que sufren alteraciones en sus niveles de glucosa con registros por arriba de 400 milímetros de azúcar en el organismo y en algunos casos se presentan estados de coma.
Recomendaciones.
Una cena tradicional, con pastas, romeros, bacalao, carnes rojas, bebidas etílicas o refrescos, en promedio contiene entre 800 y mil calorías, demasiado en comparación con lo indicado para la ingesta diaria de desayuno, comida y cena que es de mil 600 a dos mil calorías.
Las ensaladas son una opción saludable ya que las frutas y verduras aportan nutrientes al organismo y entre ellas están la típica de manzana, la de Nochebuena, la judía, la César o la del chef. Es elemental disminuir el consumo de sal, azúcar, grasas, harinas y carnes.
En el platillo fuerte se aconseja preferentemente consumir salmón, sierra o pámpano o carne tipo magra como el lomo, caña de lomo o pierna. La cena puede acompañarse de piezas de pan integral, o si es de trigo, en pequeñas porciones. Asimismo, tomar refrescos bajos en calorías y no exceder el consumo. También es válido acompañar la velada con vino tinto, entre los 90 y 120 mililitros.
Otra recomendación es consumir los alimentos en forma pausada y masticar alrededor de 20 veces cada bocado. Las personas que comen deprisa y hasta que se sienten satisfechas tienen tres veces más de riesgo de padecer sobrepeso.