Exige Calderón Gobierno humano El presidente Felipe Calderón pidió a todos los servidores públicos del país del Gobierno Federal que se pongan en los zapatos de la gente y del otro lado del mostrador con el fin de construir un Gobierno humano y sensible, además de eficiente, “algo que quizá no está en la Constitución, pero que es vital”. Ordenó cero tolerancia a la corrupción e influyentismo y a las compras amañadas de Gobierno. (Notimex)
Urge Felipe Calderón a aprobar la reforma energética para transformar a Pemex sin que se quiten recursos al ramo educativo o salud.
El presidente Felipe Calderón convocó nuevamente a transformar a Petróleos Mexicanos (Pemex) a fin de que pueda mejorar su producción y construir una refinería petrolera que vale 10 mil millones de dólares, dinero que, aseguró, no se lo quitará al ramo educativo o de salud.
El titular del Ejecutivo habló ante casi mil funcionarios públicos de la Administración federal, a quienes conminó a trabajar en intereses particulares y hacer de México el país que todos queremos.
Aprovechó para abordar el tema de reforma energética y sostuvo que la paraestatal requiere de facultades para contratar la tecnología necesaria a fin de explorar en aguas profundas.
El mandatario recordó que México es un país petrolero, “pero el asunto es poder ir a buscar ese recurso y eso implica la reforma energética”.
El titular del Ejecutivo dijo que otras administraciones hace ya varios años buscaron mecanismos para que Pemex se aliara con empresas con tecnología más moderna y así fue como trabajó junto a la empresa española Repsol y también con Shell en Estados Unidos.
Es allá, en Estados Unidos, en donde Pemex ha generado empleos y paga impuestos en ese país, lo cual se podría estar haciendo en México si se aprueba la reforma energética.
Puntualizó que con ello no se pretende privatizar el petróleo mexicano, lo que se propone es que Pemex pueda contratar a quien haga una refinería y la opere, pero la paraestatal seguirá siendo dueña del crudo.
Esa medida, aclaró es muy simple y no implica ni privatizar Pemex, ni siquiera se venderá el hidrocarburo a la refinería, simplemente “la contratamos para que refine petróleo y así, abatir el déficit de gasolina que tenemos”.
En suma, el objetivo es que Pemex tenga más facultades administrativas, de gestión y de contratación para que pueda multiplicar sus frentes de trabajo, su capacidad de operación y adquirir tecnología de punta.
Sólo así, reiteró, se podrá revertir la caída de producción de petróleo y gas y empezar a producir más, “si tenemos petróleo el asunto es que hay que ir a descubrirlo y hay que ir a producirlo, y eso requiere una reforma”. Así, el mandatario señaló que México podrá crecer al 5% al término de su Administración en el año 2012.
Advierten intereses políticos en referéndum
La reforma petrolera no puede ser objeto de un referéndum y las voces que así lo demandan obedecen a intereses políticos, sostuvo el coordinador ejecutivo de la Dirección General de Petróleos Mexicanos (Pemex), Roberto Ortega Lomelí.
Entrevistado en el marco del seminario Regulación y Financiamiento de la Infraestructura Pública en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM consideró que la sociedad no está preparada para un ejercicio de ese tipo.
Subrayó que la ciudadanía tendrá que dar un sí o no a tres o cuatro preguntas, cuando la iniciativa incluye un gran número de temas muy complicados e independientemente que no esté regulado el referéndum o el plebiscito para estos temas, hay un asunto técnico muy complejo.
Se cuestionó sobre qué tema y cómo se van a hacer las preguntas, así como qué información se le va a ofrecer a la gente para que pueda responder. Además, en la manera de formular la pregunta estará la respuesta. Por ejemplo, no se necesita un referéndum para saber que la gente no quiere que se privatice Petróleos Mexicanos (Pemex) o que quiere que se fortalezca.
Estableció que Pemex tiene una legislación compleja y está sobrerregulada, lo que impide desarrollarse como una empresa productiva y que tiene que competir a nivel internacional. Nuestra legislación está totalmente anacrónica para el tipo de desafió que enfrenta una empresa como Pemex, resaltó.