La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) negó ayer al ex presidente de Guatemala, Alfonso Antonio Portillo Cabrera, el amparo que interpuso para no ser extraditado a su país, por lo que puede ser entregado a las autoridades guatemaltecas, que lo reclaman para juzgarlo por el delito de peculado.
En una decisión unánime, la Primera Sala del máximo tribunal determinó que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) está facultada para conceder o negar solicitudes de extradición e, igualmente, para tomar en cuenta o no la opinión que emite el juez en el procedimiento correspondiente.
Portillo Cabrera, acusado en su país de peculado por 34 millones de quetzales, equivalentes a cuatro millones de dólares, impugnó los artículos 30 de la Ley de Extradición Internacional; 28 fracción I, de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal y el 7 fracciones I y X del Reglamento interior de la Cancillería, que permiten su extradición.
El ex mandatario argumentó que dichos artículos son inconstitucionales porque la extradición es una determinación del Estado de afectar la libertad personal de un gobernado, para trasladarlo a otra nación, lo que implica la privación de todos los derechos del extraditable que otorga la Constitución mexicana.
Los ministros consideraron infundados e inoperantes los argumentos del ex presidente, ya que un juez federal analizó de manera integral los conceptos de violación que planteó, además de que el procedimiento de extradición no es una controversia judicial, sino un trámite excepcional entre dos estados soberanos.
Por ello, resolvieron, la decisión de la SRE en este caso no necesita de un juicio previo ni de que exista controversia alguna que deban conocer los tribunales de la Federación.
El 31 de octubre de 2006, la Cancillería mexicana concedió la extradición a Guatemala de Portillo Cabrera, quien se encontraba en México desde mediados de 2004 sujeto a ese procedimiento, pero en libertad mediante un amparo.
En los primeros días de ese mes, Verónica Judith Valle, jueza décimo de Distrito del Reclusorio Oriente opinó que la extradición de Alfonso Portillo no era procedente, ya que el ex mandatario contaba con inmunidad diplomática por ser integrante del Parlamento Centro Americano.
Sin embargo, la SRE determinó lo contrario y otorgó su extradición al Gobierno guatemalteco, por lo que el ex presidente interpuso un amparo ante un juzgado federal, que confirmó las facultades de la Cancillería en el caso, en un fallo ratificado nuevamente ayer por la Primera Sala.
