TRISTES. Los padres de Brenda llegaron al Universitario con miedo de poder perder a su pequeña hija.
Los padres de una pequeña se encontraban disfrutando de una fiesta cuando vieron que la niña se desvaneció frente a ellos.
La llevaron en su carro
En un vehículo particular, los padres de Brenda Yaneth, de 10 años, llevaron a su hija de emergencia a Matamoros para que fuera atendida, poco antes la familia disfrutaba de una fiesta privada en el ejido Laguna Seca, de Viesca, de donde son originarios. Los padres manifestaron que alrededor de la 1:30 de la mañana, se registró una riña entre vecinos del ejido y fue cuando la niña cayó al suelo, después de escuchar detonaciones, al parecer por arma de fuego.
No sabían que pasaba
Los padres desconcertados se percataron de que sangraba la cabeza de Brenda por lo que la llevaron a la Cruz Roja de Matamoros. Fueron los paramédicos de la benemérita institución los que decidieron trasladar a la niña a la Cruz Roja de Torreón. Por la gravedad de la lesión fue llevada al Hospital Universitario para ser intervenida quirúrgicamente de manera inmediata. Se desconoce quién fue el culpable del accidente. Sin embrago, el caso fue turnado al Ministerio Público de Matamoros, para las investigaciones.