Durango. La hepatitis “A” es un proceso viral e infeccioso que suele estar asociado directamente con ambientes insalubres o de contaminación en agua y alimentos, pero también el virus suele estar en el medio ambiente.
Son los niños los más propensos a este problema hepático y cuando un menor tiene el contagio se convierte en una fuente de contaminación para sus compañeros estudiantes, por lo que dentro de las recomendaciones médicas está el aislamiento del paciente para evitar una cadena de contagios y claro está con el tratamiento médico a que haya lugar.
Estadísticas. El virus de la hepatitis “A” se contagia, cuando alguien ingiere algo contaminado por el virus de la hepatitis, a través del agua, leche y los alimentos contaminados, sobre todo el marisco, comentó Patricia Herrera Gutiérrez, secretaria de Salud en Durango, al hacer alusión a que a la semana epidemiológica número 27 se han presentado 69 casos de este padecimiento, con un claro predominio con los menores de 15 años con 52 eventualidades de esta naturaleza.
Puesto que la hepatitis “A” puede ser una infección leve, particularmente en la infancia, es posible que algunas personas no se den cuenta de que han contraído la enfermedad hasta que acusa los síntomas como son: dolor, malestares, fiebre e ictericia, que es el color amarillento que presentan y esta patología generalmente sólo provoca enfermedades de corta duración y no es causa de enfermedad hepática crónica.