Las personas con diabetes, hipertensión y obesidad deben cuidar el consumo de la comida típica de semana santa, pues algunos de los platillos contribuyen a elevar los niveles de colesterol y a descompensar el organismo
Exceso en la ingesta de alimentos ricos en sal y grasa puede descompensar el organismo de personas enfermas.
Personas con diabetes, hipertensión arterial y obesidad deben extremar los cuidados con la comida típica de la Semana Santa, pues es frecuente que el abuso en la ingestión de estos alimentos descompense el organismo de estos pacientes.
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señalaron que el camarón, bacalao, los romeritos, crustáceos, así como la sopa de haba, postres como la capirotada y las torrejas, ocasionan descompensación de la glucosa, presión arterial y elevan el colesterol en forma considerable.
Es común que en estas vacaciones, los pacientes abandonen el tratamiento y se excedan en el consumo de alimentos ricos en sal y grasa, además de que rompen con su rutina de ejercicio físico.
La recomendación para ellos es evitar los crustáceos como camarón, almejas, pulpo, jaiba, los cuales contienen altos niveles de colesterol y si los van a comer, que sea una sola vez en la semana y en poca proporción, tomando en cuenta que cuatro camarones de tamaño mediano equivalen a 275 miligramos de colesterol.
De hecho, se indicó que cuando la persona es saludable no se debe exceder en el consumo de 300 miligramos de colesterol en las tres comidas, con el objetivo de mantener los parámetros normales.
Como un ejemplo, se indicó que si la persona desayuna un par de huevos, éstos representan unos 400 miligramos de colesterol, de tal forma que si durante la cena se incluye un pan dulce u otro alimento con alto contenido de colesterol, éste se elevará de manera importante y por lo tanto, habrá una mayor cantidad de grasas y azúcares en la sangre.
Para tratar de contrarrestar esta situación, el IMSS está haciendo la recomendación de consumir todo tipo de pescados, los cuales contienen grandes propiedades proteínicas y además son ricos en Omega Tres, el cual se considera como uno de los principales agentes protectores del corazón.
Estos alimentos pueden ser de agua dulce o salada, como la trucha, blanco de Nilo o atún, que además no agravan la economía familiar por su bajo costo.
Es importante iniciar la comida con un plato de vegetales como champiñones, coliflor o chiles rellenos de frijol o de queso, calabacitas al estofado, esto en un afán de equilibrar la alimentación con las legumbres que además, proporcionan gran parte de los nutrientes que se requieren.
Además de cuidar la alimentación, en la temporada vacacional es recomendable caminar después de transcurrida media hora de la comida, como parte del ejercicio físico que se necesita para mantenerse sano.
Los especialistas del Seguro Social manifestaron que es común que en periodo de vacaciones de Semana Santa, este tipo de pacientes llegue a los servicios de urgencias por crisis hipertensivas, descompensación de glucosa y elevación de colesterol o triglicéridos, por lo que la institución insiste para que se sigan las recomendaciones señaladas.
Cuidado
Durante la Semana Santa es común que los pacientes con diabetes, hipertensión arterial
y obesidad lleguen a los servicios de Urgencias por descompensaciones en su organismo,
las cuales se atribuyen al consumo de la comida típica de la temporada.
* La recomendación es que estos pacientes eviten el consumo de camarón y otros crustáceos, bacalao y romeritos, o si los consumen que sea una sola vez por semana
*También deben evitar postres como la capirotada y las torrejas, pues tienen altas concentraciones de azúcar
* La recomendación es privilegiar el consumo de pescados y equilibrar los alimentos con ensaladas de vegetales
* Esto, además de mantener la actividad física caminando media hora después de la comida
FUENTE: Instituto Mexicano del Seguro Social