EL SECRETRARIO DE GOBERNACIÓN, Juan Camilo Mouriño titular del segundo cargo en importancia en el Poder Ejecutivo del Gobierno Federal, murió junto a otros funcionarios federales, al estrellarse el jet de dos turbinas en que regresaba de la ciudad de San Luis Potosí, después de haber puesto en marcha el Programa Bienvenido Paisano.
SE TRATA DEL SEGUNDO de a bordo del Gobierno de la República por lo que el hecho reviste relevante importancia política. Desde su designación por el presidente Calderón como el titular de la Casona de Covián en las calles de Bucareli, fue duramente cuestionado por los medios, opinadores, columnistas y escribidores como un extranjero que no tenía derecho alguno para ocupar tan significativo cargo en la Administración Pública del país.
AGOTADAS QUE FUERON las descalificaciones por su nacionalidad u origen étnico, surgieron varias investigaciones periodísticas que lo involucraban como beneficiario de una serie de contratos con Pemex, asunto que se seguía investigando hasta el día de hoy.
POR LO PRONTO el país ya amaneció con otro dolor de cabeza y renovado nerviosismo, que se viene a sumar al ya de por sí enrarecido ambiente que en lo político respira nuestro país. Sin duda es un muy duro golpe para Felipe Calderón que pierde a uno de sus más queridos colaboradores y compañero en sus andanzas políticas que lo llevaron a la Presidencia de México, pero por otra parte, también la nación se sumergirá por muchos meses como es nuestra horrible costumbre, en un mar de conjeturas, especulaciones, suposiciones e imaginaciones sobre si el desplome del jet fue un accidente aéreo o se trató de un atentado.
MUY SALUDABLE para el país sería que esto no se vuelva un nuevo caso como el trágico de Luis Donaldo Colosio en el que todo mundo opinó de manera irresponsable sobre temas forenses que desconocía. Es por ello que nos parece prudente transcribir la información que el secretario de Comunicaciones Luis Téllez y Aeronáutica Civil hicieron hasta ahora respecto del suceso.
“LAS PRIMERAS INDICACIONES es que no podemos rechazar la hipótesis de un accidente. Que a las 10 de la mañana llegarán cuatro inspectores de Estados Unidos para las investigaciones. Además, de que el Gobierno del Reino Unido mandó a un equipo de tres inspectores del Air Accidente Investigación Branch.
“QUIERO COMENTARLE al público que la instrucción del presidente es trabajar intensamente en esto con toda la seriedad que se requiere e informarle al público. La primera evidencia que se tiene para no rechazar la hipótesis de un accidente es que los restos del avión, las turbinas, están a una distancia muy cercana, y si hubiera habido alguna explosión en el aire o algún otro tipo de evento, los restos del avión estarían en una distancia más grande a la que se tiene hasta estos momentos.
“LA AERONAVE venía procedente de San Luis Potosí a 470 km/hora para su descenso en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), dentro de la norma establecida y con buenas condiciones climatológicas. La aeronave se accidentó durante la aproximación al AICM a 7.5 millas a la Pista 5 Norte. El despegue de la aeronave se realizó en condiciones del plan de vuelo por instrumentos, haciendo contacto con la torre de control de San Luis Potosí, en la frecuencia 118.9 megahertz a través de la cual se proporciona el servicio de control de aeródromo y aproximación.
“LOS SERVICIOS de tránsito aéreo, por medio de las posiciones de llegadas en la frecuencia 129.6 megahertz y aproximación 121.2 megahertz, guiaron a la aeronave hasta la radio facilidad BORDM, esto significa al radiofaro direccional de muy alta frecuencia y equipo medidor de distancia, para iniciar el procedimiento de aproximación final al AICM. La aeronave sobrevoló la radio facilidad a las 18:44 horas con 11 mil pies de altura y a una velocidad indicada de 262 nudos, aproximadamente 470 kilómetros por hora, para iniciar el descenso al AICM. A las 18:45 horas, se instruyó a la aeronave a cambiar a la frecuencia de torre de control en 118.1 megahertz a lo que el piloto acusó recibo, pero no se comunicó con la torre de control. A las 18:46 se observó la última posición de la aeronave a través del radar del AICM, a una altitud de 9 mil 700 pies y 185 nudos de velocidad, aproximadamente 330 kilómetros.
“La torre de control del AICM, así como el control de aproximación, llamaron a la aeronave XCVMC, en la que viajaba el secretario de Gobernación y su comitiva, sin obtener respuesta por lo que alertaron sobre un probable accidente”.
ESTO ES LO único que sabemos por ahora por lo que deberemos esperar a los resultados de las investigaciones, pero por favor no iniciemos especulaciones de manera sin el conocimiento de los hechos.
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