El presidente de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM), Basilio González Núñez, señaló que en este momento no existe la posibilidad de un incremento salarial de emergencia, ya que provocaría una escalada de precios y mayor inflación.
"La experiencia que tenemos en México cuando se han otorgado salarios de emergencia es que al final de cuentas se matiza una carrera entre precios y salarios y la consecuencia final de ello es que los trabajadores salen perdiendo", afirmó el funcionario.
En una reunión con la Comisión del Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados, reconoció que si se toman como referencia las crisis que ha sufrido México "de 1976 a la fecha el salario mínimo ha perdido un 74 o 75 por ciento del poder adquisitivo".
Sobre la posible homologación de los salarios mínimos, comentó que "la posición de la actual administración es avanzar en este tema; sin embargo, precisó que no es una decisión del gobierno sino de todos los los actores: los patrones, los trabajadores y el gobierno".