Gerardo Puisseaux charla con periodistas. (AP)
Hillary pide a sus seguidores que voten por su ex rival.
La senadora Hillary Clinton pidió ayer tanto a los que votaron por ella en las primarias como a los que lo hicieron por Barack Obama que cierren filas en torno al senador de Illinois, porque “es mi candidato”.
“Es el momento de unir al partido. Estamos en el mismo equipo. Nadie puede quedarse fuera”, dijo la senadora, que fue vitoreada y aclamada con entusiasmo por las casi 25 mil personas que se abarrotaban en el recinto de la convención, y que se pusieron en pie para recibirla.
“Soy una orgullosa partidaria de Barack Obama”, dijo en el discurso que posiblemente ha creado más expectación en la convención, junto al de Obama, el próximo jueves.
Hillary Clinton salió al escenario de manera muy distinta a como había imaginado hace unos meses cuando lanzó su campaña electoral, no para ser aclamada como candidata, sino para aclamar a su ex rival.
Pese a la intensidad del momento, la senadora salió al estrado con aspecto sereno y tranquilo, luego de ser introducida por su hija Chelsea, que la presentó como “mi héroe”. Su marido, el ex presidente Bill Clinton, siguió la intervención desde las gradas.
Tras unas semanas en las que se ha especulado sobre si se mostraría convincente al pedir el voto para el candidato, Hillary dedicó buena parte de su intervención a alabar con firmeza la capacidad de Obama de dirigir al país en la buena dirección, así como a criticar al candidato republicano, John McCain.
Pero no olvidó hablar de su fallida campaña presidencial, ni de agradecer el apoyo de sus seguidores, cuya fidelidad amenazó con provocar una fractura en la convención.
Hillary, que durante las primarias criticó duramente a Obama por su inexperiencia y por “no estar preparado para gobernar el primer día que llegue a la Casa Blanca”, dijo ayer que el país necesita un líder que dé “confianza y optimismo”.
“Necesitamos a alguien que muestre al mundo que con ingenio, creatividad, y un espíritu innovador, se puede conseguir cualquier cosa en Estados Unidos”, dijo.
“Cuando Barack Obama llegue a la Casa Blanca, revitalizará nuestra economía, defenderá a la clase trabajadora y afrontará los desafíos globales de nuestro tiempo. Los demócratas sabemos cómo hacer esto. Y si no recuerdo mal, el presidente Clinton y los demócratas ya lo hicieron antes”, apuntó la ex primera dama.
Clinton tuvo palabras de apoyo también para el candidato a la vicepresidencia, Joseph Biden, y para la esposa del candidato, Michelle Obama.
La senadora no olvidó criticar al candidato republicano, John McCain, a quien acusó de prometer “cuatro años más.... de los últimos ocho años”.
Según dijo, McCain promete la misma política que George W. Bush, “más estancamiento económico, combustible caro, y ejecuciones hipotecarias. Más guerra y menos diplomacia”.
Sorprende clon de Obama en las calles de Denver
Gerardo Puisseaux, hace voltear a quien lo ve andar sin sobresaltos afuera del Centro Pepsi, donde se desarrolla la Convención Nacional Demócrata, su parecido físico con el aspirante demócrata a la Presidencia Barack Obama hace dudar a cualquiera.
Decenas de periodistas y delegados demócratas que se jactan de conocer a Obama han sido sorprendidos por Puisseaux, un inmigrante cubano residente en Miami.
Más de uno ha quedado pasmado al observar a quien podría ser un perfecto clon del senador por Illinois, incluso aquellos que saben que se trata de un imitador de personajes.
El inmigrante cubano es parecido a Obama en múltiples detalles, desde su altura y complexión, hasta la sonrisa, color de piel y tipo de cabello.
Puisseaux era un trabajador de la construcción en Miami hasta hace unos seis meses, cuando el canal de televisión en español América TeVe (www.americateve.com) Canal 41 se fijo en él y lo contrató.
Desde entonces, Puisseaux, viaja a los lugares que visita Obama y provoca conmoción en cada lugar.
Sombreros con mensaje llaman la atención
Monica Stonier no necesita abrir la boca para que uno sepa a qué se dedica y quién es su candidato a la Presidencia de Estados Unidos, y es que su sombrero de copa negro con un rótulo blanco que dice “profesores por (Barack) Obama” habla por ella.
“Quiero llamar la atención”, dijo Stonier, como si sus intenciones no fueran evidentes.
La joven de 32 años del estado de Washington, al Oeste del país, forma parte de una subespecie fácilmente identificable esta semana en la sede de la Convención Demócrata en Denver: la de los amantes del sombrero extravagante.
Los miembros del grupo coinciden en señalar que su objetivo al usar el complemento es hacer algún tipo de manifiesto, desde la defensa de una mejor educación, la solicitud de un sistema de salud universal, el amor por Estados Unidos o la defensa del candidato presidencial demócrata Barack Obama.
La oferta de gorros es de lo más variopinta, aunque el “sombrero patriota” es el que se lleva la palma.
El accesorio en cuestión tiene distintas versiones, pero comparte con todos los de su categoría, los colores blanco, rojo y azul de la bandera estadounidense.
Cumplido ese primer requisito, se acepta el toque personal, desde las luces intermitentes tipo árbol de Navidad hasta los pompones, los peluches incrustados en la parte superior o delantera y las insignias, que pueden cubrir parte o la totalidad del gorro.
