Detienen a 4 presuntos miembros de ‘La Familia’ en Michoacán.
Nuevos datos recabados por los investigadores del Gobierno Federal buscan confirmar la hipótesis de que los autores del ataque con granadas la noche del 15 de septiembre fallaron, pues su objetivo no era la población civil, sino policías estatales.
De acuerdo con información que ha recabado la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) y parte de la reconstrucción de los estallidos de granadas que han hecho los fiscales federales a partir de videos y declaraciones la primera granada aparece detenida en su trayectoria por uno de los heridos cuando viajaba en dirección hacia donde se situaba el director de la Policía local, Mario Bautista y la segunda granada fue lanzada directamente hacía una patrulla.
Ambos datos permiten que sea investigada la posibilidad de que el ataque haya sido dirigido contra la Policía y en especial contra el director de Seguridad Pública del estado.
De acuerdo con las pistas que siguen los fiscales federales sobre el movimiento de los perpetradores para lanzar las granadas que dejaron un saldo de ocho muertos y 132 heridos, el hombre que se encargó de lanzar el primer artefacto explosivo pudo hacer varios movimientos para intentar situarse al frente de la valla que contenía a la multitud que acudió a los festejos patrios.
Sin embargo, al ver presuntamente que su ruta de escape se dificultaba, el sicario optó por colocarse detrás de las jardineras situadas a un costado de la Catedral. Desde ahí o más atrás, según la mecánica de movimientos que analiza y verifican los investigadores federales, se lanzó la granada.
Según las investigaciones, la dirección que seguía la granada era hacia el sitio donde se encontraba el jefe policiaco, Mario Bautista, quien estaba colocado sobre la avenida Madero, abajo y frente al balcón donde el gobernador Godoy Rangel dio El Grito para conmemorar la Independencia. El jefe policiaco se encontraba ahí, según su propia versión, con los hombres de su escolta.
Una vez lanzado el artefacto explosivo se encontró con la cabeza del ingeniero Mauricio Benítez Aguilar, quien cargaba a una menor sobre sus hombros. La granada golpeó en el lado izquierdo de la nuca al profesionista de Querétaro y lo descalabró. El objeto rebotó hacia atrás, rodó y explotó a los pies de una de las mujeres que murió y de otro joven que perdió un pie.
Caen sospechosos
Mientras tanto, el Ejército Mexicano detuvo a cuatro presuntos miembros de la organización delictiva conocida como “La Familia Michoacana” en Pátzcuaro, dentro de un domicilio ubicado en las calles Andador del Arroyo y Andador de la Cascada, del fraccionamiento Fovissste y La Querenda.
Los detenidos fueron encontrados en posesión de dos fusiles de asalto, un AK-47 y un R15, un chaleco antibalas, un uniforme militar, cartuchos, un fólder con listados de deudores de discos y películas “piratas”, entre otros objetos.
El grupo “La Familia” se ha deslindado de los ataques en Morelia, pero las autoridades no descartan su participación en los atentados.
Responsabiliza el EPR al Gobierno
El Ejército Popular Revolucionario aseguró que el atentado en Morelia, durante la ceremonia del Grito de Independencia el pasado 15 de septiembre, fue un acto de provocación de la derecha y del propio Gobierno Federal para crear un escenario artificial de militarización que justifique la persecución de luchadores sociales en el país.
Señaló que el presidente Felipe Calderón ha adoptado una estrategia paramilitarista con el propósito de implantar, a través de acciones sucias, el terror en la población y “ablandar” el terreno para la aceptación de un Estado policiaco-militar.
Calificó como “acto de barbarie” las explosiones en la plaza Melchor Ocampo la semana pasada y señaló que también le sirvieron al Gobierno Federal como represalia contra el gobernador Leonel Godoy, por haberse solidarizado con el EPR en la búsqueda de sus militantes Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez.
‘Levantan’ sicarios a familia en Michoacán
Un comando armado irrumpió la madrugada de ayer en un rancho de Michoacán y se llevó por la fuerza a 10 integrantes de una familia, entre ellos un conocido agricultor de la región, reportaron autoridades policiacas.
Informes oficiales indican que en el sitio quedaron esparcidos algunos casquillos de rifles AK-47 y AR-15, así como manchas de sangre.
El ataque se registró a las 3:30 horas en un domicilio del Rancho Las Ordeñitas, municipio de Parácuaro, uno de los dominios del narcotráfico en esta entidad y ubicado en la llamada Tierra Caliente de Michoacán.