La comisaria europea de exteriores, Benita Ferrero, anunció que el bloque europeo aportará por lo menos 660 millones de dólares para reconstruir Georgia. (Archivo)
Inicia hoy en Bruselas reunión de donantes; asisten representantes de EU y la UE.
Tal y como sucedió con las guerras de Bosnia, Kosovo, Irak y Afganistán, la Unión Europea y las instituciones financieras internacionales cargarán con la factura de la reconstrucción luego de un conflicto armado. Ayer prometieron más de dos mil millones de dólares para reconstruir Georgia tras la guerra con Rusia.
Está previsto que Georgia reciba unos dos mil 750 millones de dólares en una conferencia de donantes que se celebrará hoy en Bruselas convocada por el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, y el Canciller francés Bernard Kouchner, cuyo país ejerce la presidencia semestral de la Unión Europea.
Los fondos serán aportados por un bloque de 67 países, incluyendo los 27 de la UE, y las principales instituciones financieras del planeta, como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Europeo de Inversiones.
La comisaria europea de Exteriores, Benita Ferrero, anunció que el bloque europeo aportará por lo menos 660 millones de dólares, los cuales se sumarán a los mil millones prometidos por la Casa Blanca y los 750 millones del FMI.
Los recursos serán utilizados para apoyar el retorno de los refugiados a sus hogares, patrocinar la reconstrucción de puentes, puertos y carreteras, así como para darle mantenimiento a los oleoductos que dan salida al gas y petróleo del Caspio con destino a occidente.
De confirmarse el monto prometido, el presidente de Georgia, Mikhail Saakashvili, habrá recibido más de lo esperado para revertir el devastador impacto que ha tenido en la economía del país la incursión militar rusa que virtualmente ha consumado la secesión de las provincias de Osetia del Sur y Abjasia.
Saakashvili había pedido a la comunidad internacional dos mil millones de dólares para cubrir las necesidades más urgentes y reactivar la economía del antiguo satélite soviético.
Los fondos recolectados deben permitir además que la economía georgiana vuelva hacia fines de 2009 a los niveles de crecimiento anteriores al conflicto con Rusia de principios de agosto, del orden del 10.5 por ciento anual.
El encuentro servirá además para informar sobre el trabajo de los 330 observadores europeos desplegados en Georgia y evaluar el cumplimiento del acuerdo firmado por el Mandatario francés Nicolas Sarkozy y su colega ruso Dmitry Medvedev.
El conflicto estalló en agosto pasado cuando el Ejército georgiano trató de recuperar por la fuerza el control de la separatista región de Osetia del Sur.
La intervención armada georgiana desencadenó una contundente respuesta militar de Moscú, que inició con el despliegue de tanques y blindados y siguió con intensos bombardeos que golpearon fuertemente la infraestructura del país.
Las fuerzas del Kremlin avanzaron hasta las puertas de Tbilisi y se detuvieron ante la fuerte condena de la comunidad internacional.
Rusos patrullarán frontera entre Georgia y separatistas
El Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) patrullará la frontera entre las regiones separatistas de Osetia del Sur y Abjasia y el resto del territorio georgiano administrado por Tiflis.
Un acuerdo fronterizo al respecto será firmado por Moscú y los separatistas en cuanto la Duma (Cámara de Diputados de Rusia) ratifique a final de mes los convenios de amistad, cooperación y asistencia mutua en caso de agresión exterior.
“La vigilancia conjunta de la frontera abjasa ayudará a reducir al mínimo los ataques subversivos en el distrito de Gali por parte de los servicios especiales georgianos”, aseguró Ruslán Kishmaria, asesor del líder abjaso, Serguéi Bagapsh, a la agencia rusa Interfax.
Expresó su confianza en que Rusia ayude a Abjasia a construir la infraestructura limítrofe “a lo largo de los 80 kilómetros de frontera con Georgia” para evitar incursiones enemigas.
