SONETO PARA ALBERTO GONZÁLEZ DOMENE
Mucho le agradezco a Beto
su crónica de homenaje;
inmerecido pasajé
que acepto como gran reto.
Algún poema escribí
que Dios me dictó en secreto
y tal vez, por eso, Beto
aplaudió mi buen soneto.
Quedó tu homenaje escrito.
Eres culto en buena prosa.
Plasmas arte en manuscrito
aunque pecas con tu glosa.
No es sublime lo fortuito
que en mi corazón reposa.
Del libro:
En el Alarido de lo Inmarcesible.