La Dirección Municipal de Salud Pública anunció la construcción de una clínica de inspección
El Siglo de Durango
Venden caro su amor. Sigue incrementándose el padrón de sexoservidoras, hasta la fecha la Dirección Municipal de Salud Pública ha registrado 550 mujeres y 30 hombres que se dedican al oficio más antiguo del mundo, sin embargo no todas acuden semanalmente a sus revisiones.
Así lo dio a conocer el director municipal de Salud Pública y Medio Ambiente, Alejandro Campa Avitia, quien expuso que se han realizado recorridos a los bares en donde se tiene sexoservicio, precisó que hay algunas mujeres y hombres que se resisten a acudir a la Clínica de Inspección.
“Las revisiones varían, de las que se tienen en el padrón de 550 en ocasiones solamente llegan a acudir 450 a la semana”, manifestó el funcionario municipal.
LOS OPERATIVOS
Comentó que dentro de los operativos que se han hecho, desde que inició de la Administración Estatal el padrón se ha incrementado considerablemente, ya que no se tenía una lista del número de sexoservidoras existentes en la ciudad.
Manifestó que a pesar de los operativos hay muchas mujeres que aún no acuden a su inspección, ya que tienen miedo a presentar enfermedades venéreas o el peor de los casos el virus del VIH, por lo que prefieren no saberlo.
Manifestó que son cerca de ocho féminas las que no han acudido, a pesar de que se les ha detenido en numerosas ocasiones y se les ha hecho el exhorto para que saquen su tarjeta de sanidad y puedan acudir al médico una vez por semana.
NUEVA CLINICA
A pesar de que ya se tenía un edificio para instalar la nueva Clínica de Inspección, se decidió no instalarla, por lo que ahora la dependencia municipal se da a la tarea de encontrar un terreno que sea propiedad del Municipio para poder construir los consultorios.
Campa Avita expresó que la Comisión de Salud autorizó 1.5 millones de pesos para la habilitación de este nuevo espacio, donde se ampliará el número de consultorios a cinco y se tendrá un proctólogo para que revise a los sexoservidores, actualmente se tiene el apoyo de una psicóloga y un dentista.
