Al iniciar la jornada de lucha por la emisión de la convocatoria para el relevo sindical sin condiciones, unos 70 mil maestros de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), dejaron sin clases ayer a un millón 300 mil alumnos e instalaron un plantón que durará 21 días en el Zócalo de la capital.
Los maestros de la llamada “ala democrática” se movilizaron ayer en forma simultánea en las siete regiones de la entidad oaxaqueña “para darle la cobertura y apoyo al plantón” que instaló el magisterio de Valles Centrales en el zócalo de la capital, donde cerraron 20 calles del Centro Histórico.
En algunas regiones, como en la Mixteca y la Costa, los maestros bloquearon las carreteras federales, mientras que en otras zonas, como el Istmo de Tehuantepec, los docentes únicamente marcharon, pero todos suspendieron sus labores académicas en casi 13 mil centros educativos.
El secretario de prensa de la sección 22 del SNTE, Daniel Rosas Romero, quien encabezó en la ciudad de Matías Romero la protesta de unos 10 mil maestros, señaló que las movilizaciones “son para arrancarle a los charros del SNTE la emisión de la convocatoria” para que releven a sus dirigentes.
Añadió que también demandan que los gobiernos Federal y Estatal, de Felipe Calderón y Ulises Ruiz Ortiz, cumplan con los acuerdos suscritos en octubre de 2006, tras el largo paro magisterial que colapsó la vida de la capital oaxaqueña, entre ellos, “la devolución de más de 100 escuelas” ocupadas por la opositora sección 59 del SNTE.
Apenas en su asamblea estatal celebrada el viernes, el magisterio oaxaqueño consideró como “mínimas e insuficientes”, las respuestas que dieron la Secretaría de Gobernación y el Gobierno de Oaxaca al pliego petitorio que entregaron el primero de mayo y que tiene demandas sociales, económicas, políticas y educativas.
Ayer, en medio de la incertidumbre de los comerciantes, unos cinco mil maestros de la región de Valles Centrales instalaron un plantón en el Zócalo y cerraron unas 20 calles que lucen con campamentos de plástico de todos los colores y cartones tendidos en el piso. Durante tres días, los alumnos de esa zona no tendrán clases.
El dirigente de los hoteles de Oaxaca, Sergio Bello alertó que los plantones generarán nuevas pérdidas económicas al sector turístico de la capital, que, dijo, todavía no se repone de las pérdidas que produjo el largo conflicto de 2006, cuando en Oaxaca se instalaron más de mil barricadas.
Por su parte, Florentino Martínez López, vocero de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca convocó a los comerciantes del Centro Histórico para que sumen a las protestas y así no se prolongue el plantón y no salgan perjudicados los comerciantes.
El vocero de la sección 22 del SNTE, Daniel Rosas Romero advirtió que si no hay respuestas positivas a sus demandas, el magisterio oaxaqueño consultará “que otras acciones se tomarán”, no descartó el paro indefinido y anunció el boicot “a la Guelaguetza comercial”.
