Ayer a la media noche París recibía la flama olímpica. La seguridad se extrema este lunes en la capital francesa, donde el fuego olímpico recorrerá cerca de 28 kilómetros.(AP)
Hace poco más de tres años Londres le arrebataba a París la sede de los Juegos Olímpicos de 2012. Después de su accidentado paso por la capital de Inglaterra, donde un ciudadano intentaba apagarla argumentando la violación a los derechos humanos en China, ayer a la media noche París recibía la flama olímpica. La seguridad se extrema este lunes en la capital francesa, donde el fuego olímpico recorrerá cerca de 28 kilómetros.
Entrevistado por la cadena de televisión France 2, el atleta Stephan Digane, quien portará el fuego olímpico, reiteraba su intención de llevar un broche sobre su camiseta con la leyenda “Por un mundo mejor”, una medida que se mantiene bajo la lupa pues el reglamento del Comité Olímpico Internacional (COI) prohibe a los deportistas expresar cualquier postura política en los Juegos Olímpicos, los cuales representan la hermandad entre los pueblos.
Entre tanto, se espera que la flama olímpica parta hacia las 12:35 del primer piso de la Torre Eiffel. Tras recorrer 28 kilómetros llegue al Estadio Charlety, ubicado al suroeste de París. En su trayecto hacia París, el fuego olímpico corrió el riesgo de ser apagado. Las autoridades inglesas reportaban unos 36 detenidos.
El responsable de la política deportiva del gobierno de Nicolás Sarkozy, Bernard Laporte ha manifestado a la prensa que puede existir una “instrumentalización de los deportistas” durante el paso del fuego olímpico por Francia. Pero ha aclarado que “somos un país democrático, donde cada uno tiene el derecho de expresarse y mostrar sus convicciones. Pero hay que respetar la flama olímpica que es un símbolo”.
La carta olímpica, en su artículo 51.3, excluye toda demostración o propaganda. “Ningún tipo de demostración o de propaganda política, religiosa o racial está autorizada en un lugar u otro sitio olímpico”.
La organización Reporteros sin Fronteras (RSF) prevé acciones “simbólicas” ante la llegada de la flama olímpica. Según su secretario general, Robert Ménard, declaró a la televisión francesa: “vamos a hacer dos cosas”, adelantó. Llamar a los parisinos a manifestarse frente a la Torre Eiffel a partir del medio día para reconocer que está presente el fuego olímpico “pero también la realidad china.
El 24 de marzo pasado, procedente de Grecia, el fuego olímpico llegaba a Pekín, sede de los Juegos Olímpicos de 2008. El gobierno de Nicolás Sarkozy se había manifestado sobre la posibilidad de boicotear los Juegos ante el conflicto que prevalece entre China y el Tíbet.
En la Asamblea Nacional un diputado socialista se había pronunciado por colocar una bandera del Tíbet, pero fue rechazada su petición el viernes pasado por el presidente de la Asamblea de los diputados.