“Está cerrada la mina. No hay ningún tipo de actividad. No estamos dispuestos a arriesgar una sola vida para rescatar cadáveres”. JAVIER LOZANO ALARCÓN, SECRETARIO DEL TRABAJO
Para la Secretaría del Trabajo y Previsión Social el caso Pasta de Conchos está cerrado. Javier Lozano Alarcón, titular de esta dependencia, afirmó que la mina está cerrada y no puede volverse abrir, así que los cadáveres de los mineros no se pueden sacar como reclaman sus familias.
“Está cerrada la mina. No hay ningún tipo de actividad. No estamos dispuestos nosotros a arriesgar una sola vida para rescatar cadáveres. La relación laboral que existía se liquidó”, dijo Lozano en entrevista con la Asociación de Editores de los Estados (AEE).
“Ya no es tema realmente de la Secretaría del Trabajo. Es un tema de Protección Civil: No acercarse a ese lugar por la concentración de gas, por el riesgo de derrumbes”, dijo el funcionario federal.
La tragedia de Pasta de Conchos ocurrió el 19 de febrero de 2006, al explotar una mina en San Juan de Sabinas, Coahuila. El saldo fue de 65 mineros muertos. A más de dos años del accidente los familiares de los trabajadores insisten en la necesidad de rescatar los cuerpos, petición que según la Secretaría del Trabajo es imposible cumplir.
La mina era operada por el Grupo México y a pesar de las denuncias hechas por organizaciones de derechos humanos respecto a las condiciones de inseguridad, no hubo sanciones para la empresa tras pagar una indemnización.
“Lo que pasa es que la legislación de Coahuila es muy particular por decirlo suave. En el país es la única que se hace una reparación del daño económicamente y se sobresee la causa penal”.
Lozano comentó que tras la tragedia únicamente fueron castigados el exdelegado de la Secretaría del Trabajo en Coahuila, Pedro Camarillo y cinco funcionarios más de esta dependencia quienes fueron inhabilitados.
