El payaso “Pajarín” afirma que es víctima de acoso por parte de las autoridades municipales.
Durango. Ha quedado atrás la callada y tranquila ciudad colonial; payasos que trabajan en la vía pública de la capital del estado denuncian que son víctimas de acoso por parte de autoridades municipales, quienes les impiden llevar el sustento familiar a sus hogares al no permitirles ganarse la vida.
Aunque se dedican a dar alegría a la gente desde niños de tres a 99 años, se les impide trabajar en las calles, no se les quiere dar permiso por parte de la Coordinación General de Inspección Municipal, narró el payaso “Pajarín”, y cuyo nombre es Víctor Armas.
Promoción turística. Recientemente uno de sus compañeros fue llevado a los separos de la Dirección Municipal de Seguridad Pública, quien fue detenido con lujo de violencia y se le incomunicó más de 36 horas.
Dijo que esto no se vale ya que además han sido amenazados con golpearlos si no se retiran de las avenidas del primer cuadro de la ciudad, ya que la labor que realizan atrae al turismo.
Teatro urbano. En las grandes urbes como la ciudad de México existen payasos y en Durango les cierran las puertas para trabajar, y de la pequeña cooperación que nos da la gente de eso vivimos honradamente, dijo Éric Treviño, el payaso “Caspar de Perucci”.
Indicó que el trabajo que desarrollan es teatro urbano y no se les puede prohibir, por lo que pidió al Cabildo de Durango que revise su situación, ya que lo único que desean es trabajar y hacer reír a la gente.
