“Para salir de la crisis económica se requiere producir, pues el trabajo genera riqueza y en cuanto al campo, sólo falta que la Comisión Nacional del Agua se ponga las pilas y autorice un ciclo agrícola completo”, declara el dirigente de la Sociedad de Solidaridad Social Manuel Murúa, Carmelo Ortega Bermúdez.
Ante la autorización de 1,050 millones de metros cúbicos (Mm3) para el riego de 56 mil hectáreas en el ciclo agrícola Primavera-Verano 2009, el dirigente campesino dice que Conagua se basa en reglamentos obsoletos y fuera de toda realidad.
“Sabemos que la presa Lázaro Cárdenas tiene casi 300 millones de metros cúbicos por arriba del NAMO (Nivel de Agua Máximo Ordinario), que es de 2,816 millones, de tal manera que sí se puede autorizar el ciclo agrícola completo para unas 85 mil hectáreas.
“Si autorizan el ciclo completo, podríamos establecer en la Región Lagunera 40 mil hectáreas de algodón, que es el cultivo que le dio auge a la comarca y genera muchos jornales. No vemos por qué no se puede autorizar”, enfatiza Ortega Bermúdez.
Añade que sólo están pidiendo unos 300 Mm3 más de lo autorizado hasta el momento, pues ahora es cuando se requiere producir. “El trabajo es la fuente original de la riqueza y no se entiende la actitud de la Conagua, pues si se extraen 1,300 millones, la presa se quedaría al final de los riegos con 1,800, es decir, con casi el 63 por ciento de su capacidad, más las recargas por las lluvias”.
Considera que hay una contradicción en las autoridades agropecuarias de nivel federal, pues por un lado hablan de apoyar la producción y por otro la reprimen.
“Otro problema es el desorden actual en el tandeo de riego, lo que ocasionó incluso que la producción haya venido cayendo, pues el rendimiento por hectárea es de seis pacas de algodón en promedio, cuando en el 2006 fue de hasta ocho pacas”.
Con el ciclo completo, dice, se terminaría con el desorden y el mal manejo que se hace del agua por parte de los encargados de los Módulos de Riego, ante la complacencia de la Conagua.
Ortega Bermúdez lanza una advertencia; “si esta situación no se corrige, si no nos dan agua para un ciclo completo, las dispersoras de crédito nos podríamos retirar y eso a nadie le conviene, pues bajamos alrededor de 500 millones en créditos para el campo”.
Destaca también la necesidad de hacer cambios al reglamento que controla los Módulos de Riego, para terminar con el desorden en el manejo del agua.