El procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, afirmó que existe un diagnóstico claro y una estrategia precisa para establecer un nuevo despliegue nacional de fuerzas en coordinación con los tres niveles de gobierno para combatir la delincuencia organizada.
En entrevistas radiofónicas señaló que la aplicación de ese mecanismo permitirá recuperar territorios, fortalecer a los gobiernos locales y organizar a las fuerzas de manera potente y efectiva, además de reconstruir a las policías municipales y estatales.
"El objetivo del presidente Felipe Calderón es recuperar la tranquilidad, la confianza y la paz para los ciudadanos, y en esa tarea el Estado mexicano tiene que usar todos los elementos a su alcance, ante el poder de fuego que tienen las organizaciones criminales", apuntó.
En ese sentido señaló que la decisión de combatir sin tregua a la delincuencia tiene el objetivo de garantizar que los mexicanos vivan sin sobresaltos.
Medina Mora reconoció que no hay una sola entidad del país en la que no exista el crimen organizado, incluido el Distrito Federal, y prueba de ello es que hace meses fue detenido en la ciudad de México el llamado "JC".
Comentó que uno de los objetivos es capturar a los líderes de los cárteles de la droga que operan en territorio nacional y prueba de la tarea que se hace son los decomisos y las capturas que se han logrado en la presente administración.
"La captura de Joaquín Guzmán es una asignatura pendiente, es un objetivo prioritario y no quitaremos el dedo del renglón, aunque esta persona ya no es el operador del cártel de Sinaloa", puntualizó.
El titular de la Procuraduría General de la República (PGR) reconoció que las organizaciones criminales tienen enorme movilidad ante el acoso a que han sido sometidas por las autoridades.
Un ejemplo de ello, dijo, son los cateos que se realizaron la víspera en la ciudad de México, donde fueron detenidas 11 personas y se presumía que a esos inmuebles eventualmente llegaban los hermanos Beltrán Leyva.
Por otra parte confirmó que este día fue detenido Jesús Navarro Montes por su presunta responsabilidad en la muerte de Luis Aguilar, un elemento de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.
El funcionario comentó que ya fueron identificados tres de las seis personas que se encontraron con el tiro de gracia en una casa de Tijuana y al parecer se trata de integrantes de la delincuencia organizada contrarias al cártel de los hermanos Arellano Félix.