La ejecución del mexicano José Ernesto Medellín está programada para este martes. (Agencia Reforma)
La última voluntad del mexicano es que sus restos y pertenencias sean entregados a una amiga.
El mexicano condenado a muerte, José Ernesto Medellín, pidió que no hubiera testigos a la hora de su ejecución, que se espera sea hoy a las 18:00 horas, si el gobernador de Texas, Rick Perry, o la junta de perdones no le otorgan clemencia.
La última voluntad del mexicano, de acuerdo a la vocera del Departamento de Justicia Criminal de Texas, Michelle Lyons, es que sus restos y pertenencias fueran entregados a una amiga de la que tiene gran aprecio y que vive en Houston.
Describió que todos los presos tienen derecho a una última cena, sin embargo, Medellín la rechazo, así como también desairó la posibilidad de asistencia religiosa.
“En la carta que firmó desde los últimos días de julio, el señor Medellín pide que tampoco estén sus papás al cumplir la sentencia, únicamente permitió la entrada de su abogada y obviamente el personal de la prisión”.
Michelle dijo que los lineamientos internos del DJCT le impedían dar a conocer el nombre o los datos generales de la persona a la que Medellín pretende que se le entreguen sus pertenencias y quien puede reclamar su cuerpo.
El mexicano Medellín fue acusado y encontrado culpable en 1994, cuando tenía 18 años, de haber violado, mutilado y asesinado a dos adolescentes un año antes en Houston.
De acuerdo con el departamento de Justicia Criminal, era el rito de iniciación de Medellín en la pandilla Balcks & Whites.
El asesinato de las jóvenes fue cometido en 1993 por Medellín y otros cinco miembros de su pandilla que, después de abusar de ellas, las colgaron con un cinturón.
Tres de los participantes del asesinato fueron condenados a muerte, otros dos fueron sentenciados a cadena perpetua y el hermano de José Medellín, llamado Venancio, recibió una condena de 40 años, luego de colaborar con las autoridades en la resolución del crimen.
De acuerdo con una versión no oficial, pero tampoco descartada por las autoridades, la amiga a la que se le entregaran los restos de Medellín, 24 horas después de su ejecución, es Sandra Crisp, quien junto con sus abogados, Sandra Babcock, Donald Donovan y Cathrine Amirfar, son los únicos autorizados por él para estar presentes el día de su ejecución.
El consulado se defiende
El cónsul General de México en Houston, Carlos González Margallón, aseguró que ellos hicieron todo lo posible desde el momento que se les dio vista del caso para que se evitar la pena de muerte, sin embargo, “ya habían pasado cuatro años en donde una defensa mal fundada perjudico al señor Medellín”.
Comentó que, incluso, “financiamos un estudio a profundidad, con instancias privadas, pero reconocidas por la autoridad de Estado Unidos de que el señor Medellín fue víctima de las circunstancias en las que vivió”.
Protestan ONG’s por ejecución de mexicano
Organizaciones de Derechos Humanos no gubernamentales de Nuevo Laredo y Reynosa, se manifestaron este en las inmediaciones del puente Internacional Reynosa-Hidalgo, como protesta por la inminente ejecución de un mexicano más en Estados Unidos.
Con pancartas y consignas en contra de la pena de muerte, los activistas se postraron a un costado del cruce fronterizo, y en el punto que divide a México de los Estados Unidos, iniciaron de manera pacifica su manifestación, entregándoles a peatones y automovilistas, volantes contra la pena de muerte, y en este caso alusivos a la inminente ejecución del neolaredense José Medellín, programada para el este martes 5 de agosto en la prisión de Huntsville, Texas.
Muchos automovilistas aplaudieron la manifestación emprendida por las organizaciones derechohumanistas y con toquido de claxon, aprobaron la campaña contra la pena de muerte, más sin embargo, otros les manifestaron su rechazó ya que afirmaban que Medellín no merecía más que la muerte hasta dos veces, ya que éste y sus compinches no tuvieron piedad a la hora de violar y asesinar de manera sádica a las dos menores de edad.
