El presidente de Sudán, Omar Hassan al-Bashir encabezó la firma de la nueva Ley electoral en Jartum (Sudán), horas después de que su nombre fuera mencionado como sospechoso de crímenes de guerra por la Corte Criminal Internacional (CCI) de La Haya. (EFE)
El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, pidió ayer una orden de detención contra el presidente de Sudán, Omar al Bachir, por genocidio, crímenes de guerra y lesa humanidad en Darfur, donde han muerto más de 300 mil personas en cinco años de conflicto.
“Está claro que cada Gobierno tiene derecho a controlar su territorio, pero ningún Gobierno tiene derecho a cometer genocidio para controlarlo”, dijo el fiscal argentino en rueda de prensa.
La fiscalía sostiene que Al Bachir “creó y aplicó un plan para destruir una parte sustancial de las etnias Fur, Masalit y Zaghawau, las cuales, según Moreno Ocampo, constituyen una población de unos 2.5 millones de personas, de los 4.5 millones de habitantes de Darfur”.
La acusación incluye en total diez cargos: tres de genocidio, cinco de crímenes de lesa humanidad y dos cargos de crímenes de guerra, incluyendo tortura, asesinatos, acoso y daño psicológico y violación.
El fiscal mantiene que “el miedo, el hambre y la violación de mujeres y niñas son las armas más eficientes para cometer genocidio”, un crimen que “todavía sigue produciéndose” en Darfur.
Centrándose especialmente en el delito de violación, Moreno Ocampo ha explicado que “se utiliza para matar el espíritu de un grupo”.
Para el fiscal argentino, “lo que ha pasado en Darfur es consecuencia de la voluntad de Al-Bachir (...) que tiene control absoluto en Sudán”.
BUSCARÁN BLOQUEAR DETENCIÓN
Por su parte, Sudán acudirá al Consejo de Seguridad de la ONU para bloquear la orden de detención contra su presidente, Omar Hasan al Bachir, por genocidio, solicitada por la fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI), dijo ayer el embajador sudanés ante Naciones Unidas, Abdalmahmud Abdalhaleem.
“Hemos pedido a miembros del Consejo de Seguridad que intervengan en este caso”, señaló el diplomático. Aseguró que el máximo órgano de la Organización de Naciones Unidas (ONU) tiene la autoridad para bloquear el proceso porque fue el Consejo el que autorizó en 2005 que el fiscal jefe del CPI, Luis Moreno-Ocampo, investigara la violación de derechos humanos en el conflicto de la región sudanesa de Darfur.
“Se debe dejar claro si se está a favor de la paz y de detener el derramamiento de sangre, o primero se está con la justicia, aunque para nosotros eso no es justicia”, opinó el diplomático sudanés.
Abdalhaleem advirtió que Jartum “está considerando todo tipo de opciones” para responder a la decisión de la fiscalía internacional, pero no aclaró si ello incluía el uso de la fuerza.