"Cuanto antes" se deben de realizar negociaciones diplomáticas para garantizar una explotación eficiente y equitativa de los yacimientos de hidrocarburos que existen en la frontera marítima de México con Estados Unidos y Cuba, plantea el Senado.
De acuerdo con el proyecto de dictamen de las comisiones unidas de Relaciones Exteriores de América del Norte y de Energía, nuestro país no podría cruzarse de brazos cuando frente a las costas de Texas y Tamaulipas hay ya empresas petroleras extranjeras que se preparan para extraer hidrocarburos en el corto plazo.
Por ello, según el documento, “es indispensable que el gobierno inicie cuanto antes negociaciones con su homólogo estadounidense respecto a la zona conocida como Cinturón-Plegado-Perdido”.
También considera indispensable llevar a cabo negociaciones para delimitar la zona marítima conocida como Hoyo de Dona Oriental, sobre todo porque se tiene conocimiento que el gobierno de Cuba ha otorgado permisos o concesiones a diversas empresas petroleras internacionales para explorar y explotar campos cercanos a ese sitio.
En las aguas del Golfo de México, en los límites con Estados Unidos y Cuba, se han detectado presumibles yacimientos de petróleo y gas. Hasta ahora están identificadas tres zonas: Hoyo de Dona Occidental, Hoyo de Dona Oriental y Cinturón-Plegado Perdido.
México, desde el 2001 tiene firmado un tratado con los Estados Unidos, que vence en enero del 2011, sobre el Hoyo de Dona Occidental, que establece no tocarlo en el plazo de diez años en espera de que ambas naciones elaboren los estudios respectivos y se preparen para su explotación equitativa, pero no existe ningún instrumento legal relacionado con los otros dos lugares.
Por eso la preocupación y urgencia del Senado para que se inicien los contactos diplomáticos que permitan a México tomar la parte que le corresponde de los yacimientos petroleros que hay en su frontera marítima.
Se trata de lo que se denomina “yacimientos transfronterizos”, que están en la línea limítrofe marítima por lo que hace necesario que los países involucrados se ponga de acuerdo para llevar a cabo la explotación.
En este caso, México tendría que arreglarse con los Estados Unidos por lo que se refiere al Hoyo de Dona Occidental y Cinturón-Plegado-Perdido.
Respecto al Hoyo de Dona Oriental, las negociaciones, en el marco de las leyes internacionales, se tendrían que hacer con Cuba y Estados Unidos, porque en esa zona hay aguas de los tres países.
Desde el pasado 21 de febrero, el senador ecologista Manuel Velasco, en nombre de su grupo parlamentario, propuso un punto de acuerdo para tratar el tema de los yacimientos transfronterizos. Se sumaron Rosario Green, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, y Francisco Labastida, presidente de la Comisión de Energía.
En principio la idea nada más era revisar el Tratado sobre el Hoyo de Dona Occidental; las comisiones dictaminadoras incluyeron el Hoyo de Dona Oriental y el Cinturón-Plegado-Perdido.
Su proyecto ya se ha distribuido a los senadores y de no haber objeciones deberá de ser llevado al pleno para su aprobación.
Lo que quieren los senadores en defensa de los yacimientos que se encuentran en aguas transfronterizas:
1.-Que las secretarías de Relaciones Exteriores y de Energía informen de manera detallada sobre el avance en el cumplimiento de los compromisos contraídos por los gobiernos de Estados Unidos y México en el Tratado sobre la delimitación de la plataforma continental en la región occidental del Golfo de México, promulgado el 22 de marzo de 2001; así como la forma en que se explotarán de manera eficiente y equitativa los yacimientos transfronterizos ubicados en la zona conocida como Hoyo de Dona.
2.-Exhortar al ejecutivo a iniciar, cuando antes, negociaciones con el gobierno de Estados Unidos para alcanzar acuerdos sobre la explotación de la zona conocida como Cinturón-Plegado Perdido, ubicada en el Golfo de México, dentro de las 200 millas náuticas de mar patrimonial, en los términos de lo previsto en la Ley para la Aprobación de Tratados Internacionales en materia Económica.
3.-Exhortar al ejecutivo para que en el marco de sus atribuciones inicie negociaciones con los gobiernos de los Estados Unidos y Cuba para delimitar la zona en el Golfo de México, conocida como Hoyo de Dona Oriental, así como definir su explotación, en donde se presume la existencia de yacimientos de hidrocarburos; así como solicitarle información relacionada con dicha delimitación recabada y elaborada por el gobierno federal.