Estiman que la “piratería” genera que al año se pierdan 100 mil empleos en el país.
El comercio informal causa que el 90 por ciento de la mercancía relacionada con la industria sea “pirata”, aseguró Fidel López García, director general del Instituto para la Protección Privada de la Propiedad Intelectual y el Comercio Legal. (IPPIC).
Agregó que esta situación genera que al año se pierdan 100 mil empleos en México relacionados con la industria del cine; 35 mil 500 de la industria musical y 400 mil de la industria del vestido.
En la conferencia “Combate a la Piratería y Contrabando”, que dictó en la Escuela Bancaria y Comercial, campus Reforma, sostuvo que hoy en día el 25 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) proviene del comercio de mercancía apócrifa, situación que provoca un México menos competitivo, con un desarrollo económico lento.
Señaló que la piratería es un problema complejo de combatir, ya que esta íntimamente ligado al desempleo en el país.
“Actualmente la población económicamente activa exige 900 mil empleos anuales, pero entre 2000 y 2006, dos terceras partes no pudieron emplearse, situación que provocó que muchas personas emigraran a otro país o que optaran por desempeñarse en una actividad informal” reviró.
Dijo que otro de los factores que propicia la “piratería” es que el Ingreso Promedio Nacional de los Hogares Mexicanos es de 10,244 pesos mensuales y que los jóvenes ahora ganan 60 % de lo que ganaban sus padres.
El especialista aseguró que en los próximos años la tendencia es que las personas que ejercen el comercio ilegal sean más mujeres que hombres, de mayor edad y con escasos niveles de educación.
Dijo que es necesario que los empresarios busquen ofrecer a los consumidores productos originales que satisfagan las aspiraciones de la sociedad a precios razonables, esto con el fin de evitar orillar a la población a buscar mercancías ilegales.
Asimismo, puntualizó que es necesario que las autoridades municipales, estatales y federales, las compañías y la sociedad se alíen para actuar sobre tres ejes rectores: combatir la ilegalidad, recuperar el mercado interno y fomentar una “cultura de legalidad.
