El gobernador de Florida, Charlie Crist, lanza la bola antes del inicio del partido de los Rays de Tampa Bay. (EFE)
Los gobernadores de Florida, Charlie Crist (republicano) y de Pennsylvannia, Edward Rendell (demóctrata) realizaron ayer una apuesta sobre la Serie Mundial de beisbol que se inicia en Florida entre las Mantarrayas de Tampa Bay y los Filis de Filadelfia.
Al margen de la dura batalla que se libra en el país para las elecciones presidenciales del 4 de noviembre, Crist aceptó enviarle una caja de naranjas y las patas de cangrejo clásicas de Florida a su colega, si las Mantarrayas pierden la serie.
Mientras que el gobernador Rendell accedió a enviarle una caja de “pretzels suaves” (galleta) y Philly cheesesteak (sandwich) si la derrota es para los Filis.
Crist elogió al entrenador Joe Maddon de Tampa Bay por haber llegado a la Serie Mundial, a pesar de tener la nómina más baja de Grandes Ligas y dijo “quiero que sepan que todo el estado está con ustedes”. El gobernador de Florida tiene programado participar en el primer juego en el diamante del Tropicana Field en la serie a ganar cuatro de siete juegos que arranca esta noche en St. Petersburgo.
El duelo inédito en Serie Mundial enfrentará a unos Filis que hace 15 años no estaban en un “clásico de otoño” y 28 que no saborean un triunfo a ese nivel, y las Mantarrayas que llegan por primera vez en su corta historia. (surgió en 1995).
